"Independientemente de nuestra identidad política, racial o sexual, es un ataque contra toda la sociedad estadounidense", afirmó el mandatario.
De paso cuestionó la política de armas de Estados Unidos.
"El hecho marca el tiroteo más letal en la historia" de Estados Unidos, afirmó Obama.
"Tenemos suficientes (pruebas) para decir que fue un acto de terrorismo y de odio", fueron las palabras con que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se refirió a la masacre en un club gay en Orlando y que se ha saldado, hasta ahora, con al menos 50 muertos y 53 heridos.
"Hoy marca el tiroteo más letal en la historia" de Estados Unidos, afirmó Obama, visiblemente afectado, en una declaración hecha desde la Casa Blanca.
"Un ataque contra todos nosotros, independientemente de nuestra identidad política, racial o sexual, es un ataque contra toda la sociedad estadounidense", afirmó el mandatario a la vez que recalcó que se trató del tiroteo más mortifero en la historia de su país.
El presidente de Estados Unidos también se dio tiempo para cuestionar la polémica Ley de Armas que rige a su país.
"Nuestros pensamientos y nuestras oraciones están con los familiares de las víctimas. No vamos a ceder ante el temor. Vamos a enfrentarlo juntos", concluyó Obama.
