Iñaki Urdangarin se enfrenta a penas de entre 19,5 y 26,5 años de prisión.
El cuñado del monarca es acusado por su gestión en el Instituto Nóos.
Iñaki Urdangarin comenzó este viernes a declarar como acusado en un juicio por corrupción.
El cuñado del rey Felipe VI de España, Iñaki Urdangarin, negó ser comisionista o haber cobrado dinero, al presentarse a declarar este viernes como acusado en un juicio por corrupción, en el que se sienta en el banquillo junto a su esposa, Cristina de Borbón, hermana del monarca, y otras 15 personas.
Urdangarin está acusado de tráfico de influencias, malversación, prevaricación, fraude, estafa, falsedad, delitos contra Hacienda y blanqueo de capitales, por lo que se enfrenta a una pena de entre 19,5 y 26,5 años de prisión.
El cuñado del monarca es acusado por su gestión en el Instituto Nóos, una entidad sin ánimo de lucro a la que supuestamente desvió varios millones de euros de fondos públicos junto a su socio, Diego Torres.
Ambos, supuestamente, desviaban el dinero a empresas de su propiedad con facturas por servicios ficticios que a veces incluso duplicaban, hasta un total de 5,8 millones de euros entre 2004 y 2007.
A Urdangarin la Fiscalía le pide 19,5 años de prisión, ya que considera que él y Torres violaron la Ley de Contratos de la Administración Pública y usaron de forma fraudulenta convenios de colaboración.
Si la autoría intelectual de los proyectos corresponde a Torres, el fiscal Pedro Horrach atribuye a Urdangarin la vertiente institucional y comercial y el aspecto deportivo de algunas iniciativas, ya que le ve como un factor de atracción para obtener clientes y aumentar notoriamente los ingresos.
Urdangarin seguirá siendo interrogado la semana próxima y queda también pendiente la declaración de la infanta Cristina, que está acusada de dos delitos fiscales y que dejó de ser miembro de la Familia Real tras la abdicación de Juan Carlos I y la proclamación de su hermano Felipe VI, en junio de 2014, porque pasó de ser hija a hermana del monarca.
