El líder de Podemos (izquierda antiausteridad), Pablo Iglesias, se mostró dispuesto a ceder para facilitar la formación de un gobierno de izquierdas presidido por el socialista Pedro Sánchez y apoyado por los liberales, que "desaloje" al Partido Popular de Mariano Rajoy del poder en España.
Iglesias y Sánchez se reunieron este miércoles para intentar desbloquear el estancamiento político en España, tres meses después de que las elecciones dejaran un Parlamento fragmentado sin mayorías claras y con la necesidad de pactos para garantizar la gobernabilidad.
Al término de la reunión, Iglesias dijo a la prensa que está dispuesto a reunirse con el líder de Ciudadanos (liberales), Albert Rivera, para pedirle su apoyo, "activo o pasivo", para formar un gobierno de cambio.
También declaró que trasmitió a Sánchez que está dispuesto a quedarse fuera de ese gobierno si eso es una dificultad para el PSOE.
Iglesias admitió que su figura causa "rechazo" entre los socialistas y por eso renuncia a su pretensión inicial de ser vicepresidente en un Ejecutivo encabezado por Sánchez si eso permite un gobierno de coalición "progresista".
"Ahora le toca ceder al PSOE", dijo Iglesias, cuyo partido consiguió 69 escaños en diciembre, frente a noventa del PSOE.
Con dos diputados de Izquierda Unida ese eventual acuerdo de fuerzas de izquierda daría 161 escaños, lejos de los 176 necesarios para tener la mayoría absoluta, aunque suficientes para la mayoría simple, siempre que los socialistas se garantizaran la abstención de los liberales de Ciudadanos.
El líder de Podemos dijo que en el programa del PSOE hay "muchos elementos" para un acuerdo y recordó que los socialistas suman más con Podemos que con Ciudadanos.
Después de rechazar la investidura de Sánchez a principios de marzo en la votación parlamentaria, la postura expresada en esta jornada por Podemos supone un acercamiento al PSOE, lo que deja abierto un resquicio para la formación de un gobierno en España.