Al menos dos personas murieron -un civil y el atacante- y una quincena resultaron heridas en una serie de atentados con armas de fuego cometidos hoy en seis puntos del centro de Viena, según confirmaron los servicios sanitarios de la capital y la Policía.
"Me alegra que nuestros policías ya hayan eliminado a uno de los autores. Nunca nos dejaremos intimidar por el terrorismo y lucharemos contra esos ataques con todos los medios", señaló el canciller austríaco, Sebastian Kurz, que los calificó de "repugnantes ataques terroristas".
El atentado, el primero que sufre Viena en 35 años, comenzó con un tiroteo en una céntrica calle donde se ubica la principal sinagoga de Viena, que estaba cerrada en ese momento, y muy cercana a una frecuentada zona de bares.
"No podemos decir aún nada del motivo. No podemos descartar un motivo antisemita, debido al lugar donde comenzó", señaló el jefe del Ejecutivo, sin dar más detalles.
Desde ahí, los agresores se desplazaron por el centro de la ciudad, ametrallando a quienes ocupaban las terrazas de los locales.
Una persona murió y quince resultaron heridas de bala, siete de ellas de gravedad, en seis puntos diferentes del centro donde se produjeron los ataques.
Una de las hospitalizadas murió posteriormente debido a la gravedad de sus heridas.
El ex tenista y actual capitán de Copa Davis, Nicolás Massú, confirmó que se encontraba en el centro de la ciudad, añadiendo que "nos tienen adentro de un restaurant esperando hasta ver cuando podemos irnos de aquí".
Testigos de los ataques
"Estábamos comiendo y bebiendo, cuando oímos los tiros y al principio pensamos que eran fuegos artificiales, pero luego se oyeron más cerca y entonces la gente reaccionó con pánico", relató a EFE Petra, una brasileña que estaba en un local de la zona cuando comenzó el ataque.
Otro testigo, el rabino Schlomo Hofmeister, señaló que escuchó "un centenar de disparos" en los primeros instantes del ataque.
"Al menos un atacante disparó contra la gente que estaba sentada delante de los bares y restaurantes. La gente salió en pánico corriendo hacia el interior pero el atacante les siguió y disparó también en el interior", relató.
Cientos de personas se refugiaron en bares y restaurantes, muy concurridos hoy porque mañana comienza un nuevo confinamiento para luchar contra la expansión del virus.
En la Ópera de Viena o en salas de conciertos como la Konzerthaus o la Musikverein, muy cercanas al lugar de los hechos, miles de personas que asistían a las últimas funciones antes del cierre de un mes impuesto por el Covid-19, tuvieron que quedarse encerrados durante horas hasta que se les permitió salir escoltados por la Policía.
Terrorista abatido
En un intercambio de disparos con la Policía, uno de los agresores cayó abatido, mientras que un agente resultó herido de gravedad.
Las autoridades han desplegado un enorme dispositivo de seguridad para localizar a al menos un terrorista que se dio a la fuga, con docenas de agentes de los cuerpos especiales y especialistas antiterroristas participando en las labores de búsqueda, que incluye también el control de las fronteras de Austria.
El Gobierno considera que la situación de peligro no ha pasado, hasta el punto de pedir a los ciudadanos que no abandonen sus domicilios si no es necesarios, e incluso emitiendo una disculpa general para que los niños puedan faltar mañana al colegios.
El ataque de hoy es el primero que sufre Viena en 35 años, desde 1985, cuando el grupo palestino Abu Nidal mató a tres personas e hirió a 39 en el aeropuerto de la ciudad.