Las altas temperaturas en Europa no cesan, por lo que los esfuerzos están concentrados no sólo en evitar que la población sufra golpes de calor, sino que en prevenir los incendios en zonas forestales. Sin embargo, Fernando Pulido, profesor de Ingeniería Forestal de la Universidad de Extremadura, advirtió que año a año esta labor se ve más difícil debido al calentamiento global: "Lo esperable es que los incendios en un escenario climático todavía más adverso sean cada vez más grandes y más destructivos, y hay que prepararse técnica y políticamente para ese nuevo paradigma", emplazó. Conozca el balance de esta ola de calor europea en el informe de la corresponsal de Cooperativa Carolina Espinoza.