El ministro griego del Interior en funciones, Mijalis Theojaridiss, afirmó que las elecciones en ese país transcurren sin incidentes y que los pocos que han habido están relacionados con el mal tiempo.
"La votación se inició a las 07:00 horas local (02:00 hora en Chile) y se desarrolla sin problemas. En unos pocas mesas de votación el inicio se retrasó porque, por causa de mal tiempo, los presidentes de mesa no habían conseguido llegar a tiempo. Todo sigue con normalidad".
En cinco mesas electorales de la región montañosa de Nafpaktía (Grecia occidental), la nieve había bloqueado las carreteras y fue necesario abrir un camino con quitanieves para que la gente pudiera ir a votar.
En una mesa electoral del sur de Creta el presidente tuvo que ser trasladado en helicóptero, mientras que otra en Psérimosuna, en una isla del Dodecaneso cerca de Turquía, el presidente de la mesa fue trasladado en una embarcación de los Guardacostas.
Cerca de diez millones de griegos votan este domingo en unas elecciones parlamentarias cruciales para el país, seguidas con mucha atención por el resto de la Unión Europea (UE).
En total, 19.449 colegios electorales, que cerrarán a las 19:00 hora local (14:00 hora en Chile).
El voto es obligatorio en Grecia con dos excepciones: la gente que tiene más de 70 años y los que se encuentran el día de la votación en el extranjero o a una distancia superior a los 200 kilómetros de su colegio electoral.
Resultados según las encuestas
Los votantes tendrán que elegir entre dieciocho partidos y cuatro coaliciones que se presentan a las elecciones generales.
El sistema electoral griego determina que el parlamento elige al presidente, por lo tanto, el partido o coalición ganadora puede asegurar una mayoría en el parlamento, permitiéndoles apoyar a su propio candidato.
Las encuestas pronostican que sólo siete de los dieciocho partidos entrarán al parlamento, pues la ley electoral fija un mínimo del 3 por ciento de los votos para conseguir representación, mientras que los votos de los partidos que queden fuera influyen en el umbral necesario para lograr una mayoría absoluta.
Según estas mismas encuestas el partido izquierdista Syriza, liderado por Alexis Tsipras, será ganador en las urnas, logro que le permitiría asegurar cincuenta puestos en el parlamento lo que convertiría a Tsipras en el nuevo mandatario griego.