El gobierno griego planea reubicar en estadios y gimnasios de Atenas a los miles de refugiados y migrantes que llegan a diario al puerto de El Pireo y se instalan de forma improvisada en las plazas del centro de la ciudad.
El hacinamiento y las malas condiciones sanitarias en las que se encuentran los refugiados y migrantes, en su mayoría de origen afgano, han obligado a las autoridades griegas a preparar un plan para su recepción y alojamiento.
Cientos de familias han sido trasladadas desde el estadio de Tae Kwo Do, en las afueras de la capital -que se adecuó provisionalmente debido a las lluvias-, a las instalaciones preparadas de Elinikón, el antiguo aeropuerto internacional de Atenas.
Se espera que en los próximos días las autoridades habiliten más lugares temporales, mientras finalizan las estructuras que servirán como centros de acogida permanentes.
El ministro de Migración, Yanis Muzalas, y el alcalde de Atenas, Yorgos Kaminis, se reunirán hoy para acordar el traslado directo desde el puerto de los refugiados que llegan masivamente desde la islas del Egeo hasta la capital griega.
Debido a la saturación del único centro de acogida que existe en Atenas, la Plaza de Victoria se ha convertido en el punto de encuentro para esta población que permanece al menos dos días en la ciudad, mientras se preparan para continuar su viaje hacia el centro y norte de Europa.
"No hay espacios ni siquiera para sentarse", aseguró uno de los habitantes, citado por el diario Kathimerini, que vive en los alrededores de esta plaza, que ya acumula grandes cantidades de basura y residuos.
Tan solo ayer fueron rescatadas 331 personas que naufragaron en las costas las islas de Lesbos (214), Quíos (29) y Farmakonisi (88).