Croacia registra este lunes una importante disminución en el número de refugiados que se concentraban en sus fronteras después de que varios cientos pasaran anoche a Eslovenia y otros fueran enviados desde la frontera croato-serbia a Hungría.
Según la agencia de noticias eslovena STA, en el paso de Bregana-Obrezje, en el que ayer esperaban todavía unos 700 refugiados para entrar en Eslovenia, hoy queda solo una veintena de personas.
En el cercano paso de Harmica-Rigolenci, en que ayer había 300 refugiados que habían esperado durante tres días, hoy quedan 150.
Su admisión por la parte eslovena fue acelerada después de que activistas eslovenos "pro-refugiados" pasaran a la "tierra de nadie" entre las dos fronteras donde estaban los refugiados y organizaron un bloqueo de todo el transporte por la frontera.
Desde el pasado miércoles unos 2.500 refugiados han llegado a Eslovenia que hasta ahora solo dejaba pasar a pequeños grupos.
Según la televisión pública croata "HTV", en Tovarnik, en la frontera con Serbia donde en los pasados días hubo enormes concentraciones de refugiados, quedaba esta mañana poca gente.
Por Croacia han pasado desde el miércoles pasado más de 27.000 refugiados.
Después de organizar en los primeros días su alojamiento en centros de recepción distribuidos en el país, desde el viernes Croacia decidió enviar a los refugiados directamente a Hungría.