La Policía irlandesa (Gardaí) confirmó hoy que diez personas murieron y ocho resultaron heridas en una explosión ocurrida el viernes en una gasolinera ubicada en el condado de Donegal, en el noroeste de Irlanda.
Los agentes informaron que entre las víctimas mortales hay cuatro hombres, tres mujeres, un chico y una chica adolescentes y una niña pequeña, mientras que continúan las labores de rescate entre las ruinas.
La explosión causó el derrumbe de parte de la estación de servicio y de los apartamentos continuos, causando una gran conmoción en la pequeña población irlandesa de Creeslough, a unos 50 kilómetros del territorio británico de Irlanda del Norte.
La Policía y los servicios de emergencia continúan desplazándose al lugar de los hechos, donde se ha establecido un cordón de seguridad.
En un comunicado en Twitter, la empresa Applegreen, propietaria de la gasolinera, calificó el suceso de "devastador". "Nuestros pensamientos y oraciones están con las familias y amigos de los fallecidos, los heridos y la comunidad de Creeslough", tuiteó.
El primer ministro irlandés (taoiseach), Micheál Martin, expresó sus condolencias a los familiares de las víctimas y a todo el pueblo, en el "día más oscuro para Donegal y para todo el país".
"La gente de esta isla compartirá la misma sensación de conmoción y devastación absoluta que la gente de Creeslough, por esta trágica pérdida de vidas", afirmó.