Mantener encerrado en un psiquiátrico al ultraderechista Anders Behring Breivik, autor confeso de los atentados del 22 de julio de 2011 en Noruega, en los que murieron 77 personas, le costaría a las autoridades de ese país 10,95 millones de coronas noruegas (casi 1.000 millones de pesos chilenos) anuales en gastos de personal y de seguridad.
El cálculo procede de las estimaciones de las autoridades sanitarias, que cuentan con que tendrá que haber un mínimo de cuatro personas por el día y tres por la noche en el centro especial que se construiría para él en la cárcel de Ila, al oeste de Oslo, donde permanece encerrado desde su detención, informó el diario VG.
|
Breivik ha insistido en que quiere ser juzgado como persona cuerda. (Foto: EFE) |
Un tribunal de Oslo deberá decidir el 24 de agosto, teniendo en cuenta su estado mental, si cree que el extremista noruego es o no penalmente responsable y si, por tanto, debe ir a la cárcel o ser condenado a recibir tratamiento psiquiátrico, como pide la Fiscalía.
El acusado ha insistido en que desea ser declarado siquiátricamente sano. Las autoridades noruegas han decidido que en el último caso se construiría un departamento especial de alta seguridad para él solo en Ila, ya que los hospitales psiquiátricos existentes no cumplen con las condiciones necesarias.
Ese centro especial, cuya construcción costará unos 2 millones de coronas (168 millones de pesos chilenos), incluirá una habitación, una sala de estar, un baño y un gimnasio, además de un almacén y de oficinas para los empleados.
Cuando Breivik permaneció tres semanas en observación la pasada primavera, con motivo del segundo examen mental al que fue sometido, los costos del personal del hospital psiquiátrico de Dikemark ascendieron a 2,1 millones de coronas (176 millones de pesos chilenos).
Breivik hizo estallar el 22 de julio de 2011 una furgoneta bomba en el complejo gubernamental de Oslo, causando la muerte de ocho personas. Luego se trasladó en un auto a la isla de Utøya, al oeste de la capital, donde perpetró una matanza en un campamento de las Juventudes Laboristas en la que murieron otras 69 personas.