El primer ministro noruego, el laborista Jens Stoltenberg, hizo de taxista durante un día por las calles de Oslo, experiencia que quedó registrada en un video difundido por su partido y que se ha convertido en un éxito en YouTube.
Vestido para la ocasión con un uniforme de chofer y lentes de sol, Stoltenberg iba provisto de un carné de una firma local de taxis e hizo un recorrido una tarde de un viernes de junio, se explica en el video.
Algunos pasajeros fueron escogidos de forma aleatoria, mientras a otros se les dijo que aparecieran en un lugar sin contarles quién sería su chófer.
Al final todos terminaron reconociendo a la autoridad, con quien discutieron diversos temas políticos, durante un trayecto que les salió gratis.
"Es importante para mí oír qué opina la gente en realidad. Y si hay un lugar donde la gente realmente dice lo que piensa por encima de todo es en un taxi", explica el primer ministro en el video, que hoy recogen los principales medios noruegos y que ha tenido repercusión internacional.
La idea es usar estas grabaciones, hechas con cámara oculta, en un video de campaña, siempre que los pasajeros den su consentimiento a este proyecto, elaborado en colaboración con una agencia de publicidad, informó su equipo.
Stoltenberg, de 54 años y primer ministro desde 2005, admitió que al principio se había mostrado escéptico con la idea, pero que luego disfrutó de la experiencia.
"Fue muy interesante. Me gusta hablar con la gente y conduje durante varias horas. Me dio pena cuando acabó", dijo al diario VG.
La contienda que se avecina
A pesar de su popularidad y de los elogios unánimes que recibió por su actuación tras los atentados de hace dos años en Noruega, en los que murieron 77 personas, Stoltenberg aparece por detrás en las encuestas frente a la líder conservadora, Erna Solberg, favorita para ganar las elecciones legislativas del 9 de septiembre.
Pero en caso de derrota, el actual primer ministro ya ha avisado de que no ejercerá de taxista, bromeando con sus dificultades para evitar los frenazos bruscos en un auto con cambio automático, como queda de manifiesto un par de veces en el video.
"Creo que tanto al país como a los pasajeros noruegos les serviría más que yo fuera primer ministro y no taxista", explicó.