El Partido Socialdemócrata ganó los comicios con el 28,4 por ciento, el peor resultado en la historia de la fuerza política.
El ultraderechista Demócratas de Suecia va tercero con el 17,6 por ciento y 62 mandatos, lo que le otorgaría un papel decisivo.
El bloque gubernamental de izquierda mantiene una mínima ventaja sobre la Alianza de centroderecha tras las elecciones suecas de ayer domingo, según el recuento provisional de la Autoridad Electoral, a falta de contabilizar dos de los 6.004 distritos.
La izquierda obtuvo el 40,6 por ciento frente al 40,3 por ciento de la Alianza, unas cifras que trasladadas a escaños situarían al bloque gubernamental con uno más (144 por 143), mientras que el ultraderechista Demócratas de Suecia (SD) sería tercero con el 17,6 por ciento y 62 mandatos, lo que le otorgaría un papel decisivo.
El Partido Socialdemócrata del primer ministro, Stefan Löfven, ganó los comicios con el 28,4 por ciento, casi tres puntos menos que en 2014, el peor resultado en la historia de la fuerza política que ha ganado todos los comicios en Suecia en el último siglo.
El Partido Moderado (conservador) fue segundo, con el 19,8 por ciento, 3,4 puntos peor, sus cifras más bajas desde 2002.
El SD subió 4,7 puntos y suma cinco elecciones consecutivas aumentando sus votos.
El Partido de Medio Ambiente, socio de coalición de gobierno de los socialdemócratas, bajó 2,4 puntos hasta el 4,3 por ciento; y el Partido de Izquierda, aliado externo del ejecutivo rojiverde, logró el 7,9 por ciento, 2,2 puntos más.
Los otros tres miembros que conforman la Alianza junto con los conservadores aumentaron su apoyo: el Partido de Centro creció 2,5 puntos y obtuvo el 8,6 por ciento; el Partido Democristiano, 1,8 y el 6,4 por ciento; y el Partido Liberal, el 5,5 por ciento, una décima más.
En comparación con las anteriores elecciones generales de 2004, el bloque gubernamental bajó tres puntos porcentuales y, la Alianza, subió nueve décimas.
Los votos procedentes del extranjero, que podrían jugar también un papel determinante a la hora de decidir el resultado final, no serán contabilizados hasta el miércoles.
Lo apretado del resultado dificulta el pronóstico sobre qué partidos podrían gobernar y con qué apoyos, aunque ni el bloque de izquierda ni la Alianza quieren pactar con el SD.
