La Fiscalía alemana está investigando a 20 ciudadanos turcos presuntamente involucrados en actividades de espionaje contra seguidores del predicador Fethullah Gülen, al que Ankara acusa de estar detrás del fallido golpe de Estado del pasado julio.
Según la respuesta del Gobierno alemán a una interpelación de La Izquierda, entre los sospechosos figuran tanto agentes de los servicios secretos turcos como de la Unión Turco-Islámica de Asuntos Religiosos (Ditib, por sus siglas en turco), publica el diario Die Welt.
La investigación "por la sospecha de actividades de espionaje por encargo del Gobierno turco en lo que se refiere al seguimiento de simpatizantes del movimiento Gülen" se dirige contra "20 acusados", cuyos nombres conoce la Fiscalía, pero también "contra desconocidos", señala el Ejecutivo en su respuesta.
Según Die Welt, esto permite suponer que el círculo de sospechosos identificados se ampliará en los próximos días y semanas.
No obstante, el "proceder laxo totalmente inaceptable en un Estado de Derecho contra la asociación de mezquitas Ditib por espionaje ha contribuido a que los imanes espías del (presidente turco Recep Tayyip) Erdogan hayan podido escapar a Turquía y evitar la persecución penal", criticó la diputada de La Izquierda, Sevim Dagdelen, en declaraciones al medio alemán.
Los expertos estiman que los servicios secretos turcos (MIT) han creado en Alemania una red de hasta 6.000 agentes e informadores, señala la publicación, que agrega que desde mediados de marzo, la Fiscalía está investigando entre otros también uno de los más altos funcionarios de la Diyanet, la autoridad estatal islámica de Turquía.
A finales de marzo salió a la luz que los servicios de inteligencia turcos habían facilitado a los alemanes un listado con los datos personales y fotografías de 358 supuestos gülenistas, entre ellos también dos diputados germanos, así como las coordinadas de unas 200 escuelas, asociaciones y organizaciones que relacionan con Gülen.