Las autoridades judiciales de Turquía mantienen en prisión preventiva a 32.000 acusados por supuesta implicación en el fallido golpe militar de julio pasado, dijo este miércoles el ministro de Justicia turco, Bekir Bozdag.
"Se han iniciado procedimientos contra unas 70.000 personas. De estas, unas 32.000 están en prisión preventiva, con el proceso en marcha", dijo Bozdag en una entrevista en la cadena NTV.
El ministro recordó que este número irá variando porque, por una parte, puede haber nuevos detenidos que pasen a prisión preventiva, y por otra, los ya detenidos se someten a periódicos controles judiciales durante los que el juzgado puede decretar su puesta en libertad provisional.
Bozdag subrayó que no se sabe aún cuántos de estos acusados entre rejas ahora serán finalmente hallados culpables y sentenciados.
El titular de Justicia aseguró que desde el primer día se habían tomado "medidas cautelares" para evitar fugas de los detenidos, como la suspensión del servicio de 1.500 funcionarios de prisiones por sospecha de que podrían tener vínculos con la cofradía del predicador exiliado Fethullah Gülen, al que Ankara acusa de instigar el golpe.
"Incluso hemos tomado medidas contra eventuales ataques de aviones y helicópteros. Por ahora no se da permiso de sobrevolar Sincan y Silivri", dijo Bozdag, en referencia a los municipios de Ankara y Estambul en los que se ubican las cárceles más importantes del país.
"Allí hemos colocado defensas antiaéreas", concluyó el ministro.