El presidente de Francia, Emmanuel Macron, agradeció a su homólogo chileno, Gabriel Boric, la condena "elocuente" de la invasión rusa de Ucrania en la cumbre UE-Celac a comienzos de semana, que generó roces con otros mandatarios latinoamericanos, entre ellos el brasileño Lula da Silva.
En una recepción en el Palacio del Elíseo, el penúltimo acto oficial del Mandartario en su gira europea, respondió a los elogios del presidente francés felicitándose por coincidir con Francia en "valores y mirada conjunta" en asuntos internacionales.
"Agradezco su postura inequívoca sobre la guerra lanzada por Rusia en Ucrania. Lo reiteró de manera elocuente durante su intervención en la cumbre UE-Celac", apuntó Macron, en una declaración junto a Boric antes del almuerzo de trabajo entre ambos.
Y añadió que "vamos a hablar de las iniciativas internacionales tendentes a atenuar las consecuencias de esta guerra en los países más vulnerables y también hablaremos de distintas crisis regionales. En particular la situación entre Venezuela y en Haití, que será objeto de nuestra máxima atención para encontrar un proceso para salir de esta crisis".
Según el Presidente chileno, ambos países "comparten el valor del respeto a la democracia, al Estado de Derecho y de la fortaleza institucional, y también del respeto al Derecho internacional".
Boric y Lula discreparon públicamente sobre el grado de condena a Rusia, cuando Brasil ha fustigado la invasión de manera más tibia que otros países.
Sobre este punto, el ministro de Relaciones Exteriores, Alberto Van Klaveren, afirmó que "como todos sabemos, la posición del Presidente Boric y de su gobierno, entre los cuales me incluyo, es una posición de principio de condena a la agresión rusa a Ucrania".
"Es una posición que refleja la personalidad de nuestro Presidente y que puede ser que moleste a algunos. Sabemos que el Presidente Boric tiene una gran admiración por el presidente Lula", puntualizó el canciller, que descartó un quiebre en las relaciones entre ambos países.
50 AÑOS DEL GOLPE
Por otro lado, tanto Boric como Macron recordaron la figura del presidente chileno Salvador Allende, de cuyo derrocamiento y muerte en el golpe de Estado encabezado por Augusto Pinochet se cumplirán 50 años el próximo 11 de septiembre.
"Más de 10.000 exiliados chilenos encontraron progresivamente refugio en Francia. Esta comunidad, que hemos acogido con los brazos abiertos, es hoy un vector esencial de los intercambios entre nuestras dos naciones", dijo el presidente francés.
Boric consideró "indestructibles" los lazos con Francia y agradeció "la solidaridad" de ese país tras el golpe, subrayando que esos refugiados han hecho una labor importante "hasta el día de hoy".
Se refirió en concreto al caso de dos diputados franceses nacidos en Chile, Raquel Garrido y Rodrigo Arenas, de La Francia Insumisa (LFI), partido izquierdista de oposición.
El Presidente Boric concluyó este viernes en París su gira europea con la asistencia a la proyección del documental "Revoir l´Ambassade, mémoires franco-chiliennes", sobre los 50 años del derrocamiento de Allende en la Casa de América Latina de la capital francesa.
ACUERDOS CON FRANCIA
Los mandatarios también citaron en sus intervenciones el acuerdo alcanzado entre ambos gobiernos sobre cooperación científica en la Antártida.
Boric destacó asimismo la carta de intención firmada por los cancilleres de ambos países, la francesa Catherine Colonna y el chileno Alberto Van Klaveren, para intercambiar buenas prácticas en materia de diplomacia feminista.