Rusia anunció este lunes la retirada de su 15º Batallón Motorizado de la frontera con Ucrania, después de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, pidiera el repliegue de las tropas rusas para rebajar la tensión en la zona.
Dicho batallón abandonó este lunes el polígono de Kadamovski en la región de Rostov del Don, que limita con Ucrania, con destino a su base de emplazamiento habitual en Samara, que se encuentra a más de mil kilómetros de la frontera, según anunció el Ministerio ruso de Defensa.
La fuente explicó que dicho batallón había efectuado durante las últimas semanas en Rostov diferentes ejercicios, incluido maniobras de tiro, exploración y otras tácticas militares.
Fuentes ucranianas habían informado horas antes que en los últimos días Rusia había reducido las tropas concentradas junto a la frontera hasta un número aproximado de 10.000 soldados.
Según los servicios secretos de EE.UU., en las regiones rusas de Rostov del Don, Kursk y Bélgorod, fronterizas con Ucrania, Rusia había movilizado la pasada semana a más de 30.000 soldados, además de blindados y aviación.
Esto hizo temer a las autoridades de Ucrania una invasión de su territorio para anexionarse las regiones orientales rusoparlantes después de que Moscú se hubiera hecho ya recientemente con la península ucraniana de Crimea.
"Las tropas rusas no están sólo en Crimea. Están a lo largo de las fronteras ucranianas. Están en el sur, en el este y en el norte. Podría haber un gran ataque contra el territorio continental de Ucrania y nos estamos preparando para ello", aseguró Andréi Parubiy, secretario del Consejo de Defensa y Seguridad Nacional.
Según Kiev, en total casi 100.000 soldados rusos equipados con blindados, lanzaderas de misiles, aviones y helicópteros se encontraban la pasada semana en la frontera entre ambos países a la espera de recibir las órdenes del presidente ruso, Vladímir Putin.
No obstante, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, negó el sábado que Moscú tenga planes de invadir el territorio ucraniano, aunque considere ilegítimas a las autoridades que asumieron el poder tras el derrocamiento el pasado 22 de febrero del presidente Víktor Yanukóvich, ahora exiliado en Rusia.