El PIB de la eurozona entró en recesión técnica en los primeros tres meses de este año tras concatenar dos trimestres seguidos de contracción económica, del 0,1% en ambos casos, según los datos actualizados de la oficina de estadística comunitaria Eurostat.
Por tanto, la zona euro no pudo finalmente evitar la recesión técnica que se daba por superada con los datos preliminares de Eurostat, pero que ahora apuntan a una reducción del PIB también en el primer trimestre de este año que se explica principalmente por los datos de Alemania.
La versiones iniciales estimaban que el principal motor económico de la eurozona había registrado un crecimiento nulo (0%) entre enero y marzo, pero la nueva actualización apunta a una contracción de la economía alemana del 0,3%, que se une a la caída del 0,5% del último trimestre de 2022.
En consecuencia, el dato correspondiente al PIB de la eurozona cae de la ligera expansión del 0,1% calculada en los datos preliminares a una disminución del 0,1% en la actualización de este jueves, que se suma a la contracción del mismo calibre observada entre octubre y diciembre del ejercicio precedente.
Por otro lado, la actividad económica del conjunto de la Unión Europea registró un incremento del 0,1% en el primer trimestre de 2023, evitando, en este caso sí, la recesión técnica tras un último trimestre de 2022 con un descenso del 0,2%.
En cuanto al análisis del comportamiento de las cuatro mayores economías de la Unión Europea, la de Italia fue la que más creció en el primer trimestre de este año (un 0,6%), seguida de España (0,5%) y Francia (0,2%), datos que contrastan con la tasa decreciente de Alemania.
Con respecto al resto de Estados miembros, Polonia lideró la clasificación con una expansión del 3,8%, por delante de Luxemburgo (2%), Portugal (1,6%) y Croacia (1,4%), mientras que las mayores contracciones fueron las observadas en Irlanda (-4,6%), Lituania (-2,1%), Países Bajos (-0,7%) y Estonia (-0,6%).
El estudio de cada componente del PIB arroja que el consumo final de los hogares cayó entre enero y marzo de este año tanto en la eurozona como en los Veintisiete un 0,3%, mientras que el gasto público aumentó un 1,6 % en los países de la moneda común y un 0,9 % en todo el bloque.
Asimismo, la inversión (formación bruta del capital fijo) se expandió un 0,6 % en la zona euro y un 0,3 % en la UE, las exportaciones descendieron un 0,1 % en ambas áreas y las importaciones se redujeron un 1,3 % también en las dos zonas geográficas.