Air France indicó que tendrá que suprimir más del 20 por ciento de sus vuelos este domingo, en la segunda de las cuatro jornadas de paro convocadas por los sindicatos de pilotos, lo que significa un porcentaje de anulaciones superior al que espera para hoy.
En un comunicado, la aerolínea francesa explicó que el domingo tiene intención de garantizar más del 80 por ciento de los trayectos intercontinentales, más del 85 por ciento de los viajes domésticos en el interior de Francia y "alrededor del 70 por ciento" entre el aeropuerto parisino Charles de Gaulle y otras ciudades europeas.
Esas previsiones se han hecho sobre la base de un 27 por ciento de huelguistas, ya que para este sábado eran un 25 por ciento los que se habían declarado en paro.
Air France, que reconoció que no se pueden excluir cancelaciones o retrasos de última hora, indicó que de cara a las dos últimas jornadas de protesta de sus pilotos, publicará cada vez el programa de vuelos del siguiente día, y garantizó que los clientes serán informados.
La huelga, en cualquier caso, no afecta a los vuelos que se desarrollan con aviones con las marcas Hop, KLM o Delta, ni a los de su filial de bajo costo Transavia.
Situación para este sábado
Para este sábado, la aerolínea precisó que tendrá que suprimir el 17 por ciento de los vuelos: un 7 por ciento en los trayectos intercontinentales, un 9 por ciento en los domésticos dentro de Francia y un 17 por ciento en los europeos que conectan con el aeropuerto Charles de Gaulle.
El director general, Frédéric Gagey, estimó este viernes que el movimiento le costará a la empresa decenas de millones de euros en pérdidas e hizo hincapié en que hacen todo lo posible para que los paros afecten lo menos posible a los 150 vuelos, que según su diagnóstico, iban a ser utilizados durante esos cuatro días.
Por su parte, la secretaria general del Sindicato Nacional de Pilotos de Línea de Air France, Véronique Damon, subrayó -en declaraciones a la emisora France Info- que fue la decisión de la dirección de aplicar nuevas reglas salariales desde el día 1, lo que había provocado la activación del movimiento.
Damon puso énfasis en que habían elegido "deliberadamente una nueva forma de huelga" por franjas horarias para que "penalice menos" a los pasajeros de la aerolínea de bandera, ya que así se limitan las cancelaciones de vuelos que pueden programarse en la misma jornada, pero con retraso.