El alcalde de Niza, Christian Estrosi, manifestó su más dura condena al ataque con arma blanca que dejó tres muertos -uno de ellos decapitado- en el interior de la iglesia de Notre-Dame del centro de esa ciudad, y emplazó a las autoridades a hacer todo para desterrar el "islamofascismo" del país.
"Ya basta, es hora de que Francia se exonere de las leyes de la paz para aniquilar definitivamente el islamofascismo en nuestro territorio", demandó el regidor conservador, en declaraciones que recoge RFI.
Pidió también "que todas las iglesias sean vigiladas o cerradas, así como todos los demás lugares de culto de la ciudad", luego del hecho que la Fiscalía Antiterrorista investiga como "asesinato con fines terroristas", entre otros cargos.
La Conferencia de Obispos de Francia consideró como "incalificable" el ataque y dijo que "los cristianos no deben convertirse en un símbolo a destruir"; a la vez que el delegado general del Consejo Francés de la Fe Musulmana, Abdallah Zekri, manifestó a AFP su "enérgica condena" a "la cobardía de este acto contra personas inocentes".
FRANCIA ELEVA NIVEL DE VIGILANCIA TERRORISTA
El primer ministro francés, Jean Castex, anunció este jueves que ha elevado el nivel de alerta terrorista en todo el país tras el atentado, en el que fallecieron el sacristán de la iglesia, una mujer que habría sido decapitada -según el alcalde- y un tercero que había logrado escapar gravemente herido y refugiarse en un bar cercano, pero murió más tarde.
Ante la Asamblea Nacional, Castex consideró "innoble, bárbaro y abyecto" el atentado y prometió una respuesta "firme, implacable e inmediata".
El primer ministro anunció un Consejo de Defensa extraordinario para mañana, viernes.
El alcalde Estrosi, que desde el inicio dijo que "todo hace suponer un atentado terrorista", aseguró que el autor de los hechos fue gravemente herido durante su arresto por parte de la policía municipal y que no dejaba de gritar "Alá es grande" cuando fue reducido.
EUROPA SOLIDARIZA CON FRANCIA
La Unión Europea reaccionó y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, entregó toda su "solidaridad con Francia y los franceses: mis pensamientos son para las víctimas del ataque abominable de Niza y para sus allegados. Toda Europa está con ustedes".
También el presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, se sumó a las condolencias y envió un mensaje de solidaridad: "Estoy profundamente sorprendido y aterrorizado por la noticia del horrible atentado de Niza. Es el dolor que sentimos todos en Europa. Tenemos el deber de unirnos contra la violencia y contra los que buscan incitar y expandir el odio", publicó.
A su vez, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, insistió en la necesidad de defender la libertad y los valores democráticos, unidos frente al odio: "Seguiremos defendiendo la libertad, nuestros valores democráticos, la paz y seguridad de nuestra ciudadanía. Unidos frente al terror y el odio", señaló en su mensaje en redes sociales.
"Mi afecto y solidaridad con las víctimas del ataque perpetrado hoy a las puertas de la iglesia de Notre-Dame en Niza. Nous Sommes Unis", expresó en español y francés.
Asimismo, el presidente del Gobierno italiano, Giuseppe Conte, subrayó la defensa del valor de la libertad al condenar el "vil ataque", y afirmó que este atentado terrorista "no afecta al frente común en defensa de los valores de la libertad y la paz".
"Nuestras certezas son más fuertes que el fanatismo, el odio y el terror. Abrazamos a las familias de las víctimas y a nuestros hermanos franceses. ¡Estamos Unidos!", escribió el primer ministro italiano en sendos tuits en italiano y francés.
También envió sus condolencia el primer ministro neerlandés, Mark Rutte, quien condenó el "acto abominable de terrorismo" perpetrado, junto que advertir que París no está sola en la "lucha contra el extremismo" y que Países Bajos "está de su lado", porque "nuestras sociedades nunca tolerarán el terrorismo".
También condenó el ataque el ultraderechista neerlandés Geert Wilders, que se enfrentó esta semana al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, sobre la medidas anunciadas por el presidente Emmanuel Macron contra grupos islamistas -prohibir aquellos que respalden el extremismo- tras la decapitación del profesor francés Samuel Paty por utilizar caricaturas de Mahoma en clase.
"Otra vez. Gente inocente asesinada y decapitada. Mientras no detengamos el islam y expulsemos a todos los fascistas islamistas violentos de nuestro país, estos actos bárbaros seguirán ocurriendo", escribió, en la misma línea que el alcalde de Niza.
TURQUÍA CONDENA ATAQUE: "NADA JUSTIFICA EL ASESINATO O LA VIOLENCIA"
A su turno, el Gobierno conservador islamista de Turquía también manifestó su condena "enérgica" y enfatizó que "ninguna razón puede justificar el asesinato de una persona o justificar la violencia".
El Ministerio de Relaciones Exteriores turco señala en un comunicado emitido en su página web que aquellos que "organizan un ataque tan brutal en un lugar sagrado de culto no respetan los valores religiosos, humanitarios y morales".
"Como país que lucha contra diferentes tipos de terrorismo y pierde a sus ciudadanos debido al terrorismo, hacemos hincapié en que somos solidarios con el pueblo francés, especialmente con los residentes de Niza, contra el terrorismo y la violencia", agrega el comunicado de Exteriores.
Las relaciones entre Francia y Turquía pasan por momentos de máxima tensión por una disputa en torno a la libertad de expresión, incluyendo las referidad caricaturas del profeta Mahoma tras la decapitación de un profesor cerca de París, y que se profundizaron ayer con la airada reacción de numerosos altos cargos turcos contra la revista satírica Charlie Hebdo por una portada donde caricaturiza al presidente Recep Tayyip Erdogan Erdogan, quien había llamado a un boicot de productos franceses.
PAPA LAMENTA ATAQUE Y PIDE FRATERNIDAD Y EL CESE DE LA VIOLENCIA
El papa Francisco lamentó el asesinato de tres personas y pidió "el cese de la violencia" y que la sociedad vuelva a "verse como hermanos y hermanas y no como enemigos".
"Es un momento de dolor, en un tiempo de confusión. El terrorismo y la violencia no pueden ser aceptados. El ataque de hoy sembró muerte en un lugar de amor y consolación como la casa del Señor", dijo en un comunicado el portavoz de la Santa Sede, Matteo Bruni.
El papa ha sido informado de estos hechos, está de luto por la comunidad católica y reza por las víctimas y sus seres queridos.
El pontífice, dijo su portavoz, ora también para que la sociedad "vuelva a mirarse como hermanos y hermanas y no como enemigos, para que el amado pueblo francés pueda reaccionar unido contra el mal con el bien", se lee en la breve nota.
