David Fritz relató que fue apuntado con una metralleta por un terrorista.
El joven prestó declaración a la policía francesa.
El Bataclan Concert Hall fue uno de puntos donde se registró la serie de atentados.
Minuto a Minuto: Los atentados en el centro de París
Un joven chileno estaba en el Teatro Bataclán al momento en que un grupo terrorista tomó rehenes en medio de un show donde se estima que murieron cerca de 80 personas en medio de la ola de atentados ocurridos en la noche del viernes en París, Francia.
Según informó 24 Horas, el joven fue identificado como David Fritz quien vive desde hace cuatro años en Francia.
Fritz relató que en el recinto, donde se presentaba la banda Eagles of Death Metal, el show fue interrumpido por sujetos que portaban armas de grueso calibre, quienes comenzaron a disparar al público.
Posteriormente mantuvieron rehenes a cientos de asistentes por varias horas.
El chileno, quien debió prestar declaración ante la policía, relató que pese a que fue apuntado con una metralleta por un rehén, logró escapar ileso e informar a su familia de su estado.
El Bataclan Concert Hall fue uno de puntos afectados por la serie de atentados que se registraron durante el viernes a Francia y que ha dejado más de 120 muertos y numerosos heridos.
Su madre, Ximena Goettinger, relató a Emol la angustia que vivió junto a su familia al desconocer la situación de David, tras enterarse que él se encontraba en el teatro.
"A las 9:45 comenzamos a llamar a mi hijo y no contestaba. Entonces lo llamamos a las 11:00 horas y el teléfono ya no sonaba. Casi a las 12:00 horas mi hijo mayor logró comunicarse con su novia en el sur de Francia y ella nos confirmó que él estaba en el Bataclan", señaló.
"Nosotros no sabíamos si él estaba vivo, si él estaba muerto. Nosotros no sabíamos nada".
"A las dos de la mañana él logró salir del lugar con una amiga y un amigo y nos llamó. Me dijo 'mamá estoy bien, estoy vivo, estamos en la calle, no podemos movernos de aquí y estamos esperando que la policía nos saque'", agregó.
"Él estuvo en una pieza donde habían dos terroristas y ocho rehenes", describió.
"Le pusieron una metralleta (AK-47) en la cabeza y le preguntaron si creía en Dios y mi hijo dijo que sí. Le preguntaron si era francés y él dijo que era chileno", señaló la mujer.
