Un cortocircuito, según las autoridades, desencadenó en la madrugada de este domingo un potente incendio en una fábrica de Nueva Delhi que causó la muerte de 43 personas y dejó 16 heridos, en su mayoría trabajadores, que se encontraban durmiendo en el interior del edificio.
"Han muerto 43 personas por el fuego y rescatamos del edificio a 62 personas", de las que 16 resultaron heridas, la mayoría por inhalar el humo, puntualizó e EFE el portavoz del servicio de bomberos de la capital india, Atul Garg, quien en una estimación anterior elevó la cifra de heridos a 64.
Garg comentó que "muchos murieron por respirar el humo porque muchos de ellos no se dieron cuenta del incendio porque estaban durmiendo" y agregó que "en India es común que algunos trabajadores duerman en los lugares en donde trabajan" para ahorrar gastos de alojamiento, por lo que presumió que la mayoría de las víctimas son empleados de la fábrica.
Dueño de la fábrica detenido
La policía de Nueva Delhi detuvo en la tarde de este domingo al propietario de la fábrica.
Una portavoz de la policía, Monika Bhardwaj, informó a los medios de que el dueño, identificado como Rehan y "su gestor Furkan han sido arrestados. La policía también está interrogando a los hermanos de Rehan (Shan e Imran), (y) también estamos buscando a quienes dirigían la fábrica".
"Con la información que tenemos, no hay posibilidad de recuperar más cuerpos", agregó Bhardwaj en unas declaraciones recogidas por la agencia ANI.
Ese medio también señala que contra los detenidos se ha abierto una causa bajo la sección 304 del Código Penal indio, que castiga a todo aquel que cause la muerte de una persona por un acto de negligencia y que puede acarrear penas de hasta dos años de prisión y multas.
Compensación a los trabajadores
El jefe del Gobierno de Delhi, Arvind Kejriwal, confirmó que "se otorgará una compensación de un millón de rupias (12.680 euros; 10 millones de pesos chilenos) a las familias de aquellos que han muerto y 100.000 rupias (1.270 euros; 1,08 millones de pesos) a cada uno de los heridos. El coste del tratamiento médico de los heridos será cubierto por el Gobierno".
El primer ministro, Narendra Modi, lamentó la tragedia: "El incendio en Anaj Mandi, en Delhi, es extremadamente horrible. Mis pensamientos están con aquellos que perdieron a sus seres queridos. Deseo a los heridos una pronta recuperación. Las autoridades están brindando toda la asistencia posible en el lugar de la tragedia".