Según estudios, hay más de 650 millones de armas en el mundo en poder de civiles.
Estados Unidos ocupa el primer puesto con más de 270 millones de armas.
Interpol considera el uso delictivo de las armas de fuego "una amenaza a la seguridad de los ciudadanos".
Las armas ilegales matan a 245.000 personas al año en el mundo, reveló este lunes la Policía Internacional (Interpol) con motivo de su 82 Asamblea General que se instalará en la ciudad colombiana de Cartagena.
"Sin contar los muertos que dejan las guerras, cada 75 segundos es asesinado en el mundo al menos un ser humano utilizando armas de fuego ilegales. Son 245.000 crímenes cada 365 días", señaló un informe de la Interpol divulgado por la Policía colombiana.
Según estudios internacionales citados por la Interpol, hay más de 650 millones de armas en el mundo en poder de civiles.
Estados Unidos ocupa el primer puesto con más de 270 millones de armas, lo que significa casi una por habitante, según el informe.
Por esas razones, la Interpol considera el uso delictivo de las armas de fuego "una amenaza a la seguridad de los ciudadanos, la paz, la estabilidad y el desarrollo de todo el planeta".
Para hacer frente a ese panorama, el organismo internacional cuenta con un cuadro de referencia con información sobre 250.000 tipos de armas, así como con una red de balística que almacena y compara datos sobre armas ilegales.
En el caso de Colombia, la Policía se incautó el año pasado 28.042 armas, mientras que en los últimos diez años fueron decomisadas 386.589, agregó el informe.
La Interpol inaugura este lunes en Cartagena, en el norte de Colombia, su 82 Asamblea General a la que asistirán cerca de 1.500 delegados de los 190 países que integran este organismo para debatir los desafíos mundiales en seguridad.
En la cita, que será inaugurada por el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, jefes policiales y expertos en seguridad de todo el mundo debatirán a puerta cerrada durante cuatro días respuestas para delitos como el tráfico de drogas y de armas, el terrorismo, el tráfico de productos ilícitos y la seguridad fronteriza, entre otros.
