Al menos cinco personas murieron y 44 resultaron heridas este sábado en dos terremotos de magnitud 6,1 en la escala de Richter y multitud de réplicas que sacudieron el sur de Irán, informaron los medios locales.
Los terremotos se registraron en la madrugada en la provincia de Hormozgán y, según el vocero de los Servicios de Emergencia de Irán, Mojtaba Khalidi, "hay cinco muertos y 44 heridos como resultado de los terremotos", e indicó que 22 personas lesionadas continúan hospitalizados y el resto fue dado de alta.
Según fuentes recabadas por la agencia IRNA, las víctimas se produjeron en el primer sismo, ya que en los siguientes se encontraban en las calles, fuera de sus casas, mientras que la televisión estatal mostró imágenes de casas caídas, gente en las calles y los equipos de rescate trabajando en Sayeh Khosh.
El gobernador de la provincia de Hormozgán, Mehdi Dustí, afirmó que creen que no queda nadie bajo los escombros gracias a "los esfuerzos de los equipos de rescate y la gente", además que ha comenzado la distribución de ayuda.
La fuente indicó que casi 80 pueblos se quedaron sin electricidad a consecuencia de los temblores y se cortó el agua en la región afectada, y varios puentes y carreteras sufrieron daños.
Irán tiene una fuerte actividad sísmica ya que el país está situado en el límite de varias placas tectónicas y se encuentra atravesado por varias fallas. En noviembre de 2017 un terremoto de magnitud 7,3 causó 620 muertos y más de 12.000 heridos en la provincia noroccidental de Kermanshah.