Pocos días antes del previsto reinicio en Viena de las negociaciones para restablecer el gran acuerdo nuclear de 2015, el OIEA denunció hoy que Irán enriquece cada vez más uranio hasta niveles cercanos al necesario para fabricar armas atómicas, mientras bloquea las inspecciones internacionales.
El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) hizo esta advertencia en un informe emitido este miércoles en Viena, destacando su persistente y creciente incapacidad para verificar el programa nuclear iraní.
Irán acumula ya 17,7 kilos de uranio enriquecido hasta el 60%, mucho más cerca del 90 % necesario para desarrollar un arma nuclear que del 3,67% que le impuso como tope el pacto atómico JCPOA, firmado en 2015 con seis grandes potencias.
Irán no debía producir uranio enriquecido por encima del 3,67% de acuerdo con el JCPOA, pero Washington, bajo la presidencia de Donald Trump, lo abandonó unilateralmente en 2018 y volvió a imponer sanciones contra Teherán.
Como respuesta, Irán comenzó a producir más uranio y de más pureza de lo permitido en 2019. Esta año había alcanzado un nivel del 20%, lo que acaba de quedar muy por detrás gracias al uranio enriquecido al 60%.