El Gobierno de EE.UU. pidió la "inmediata liberación" del supuesto espía estadounidense Amir Mirzaei Hekmati, que confesó ante la televisión iraní que trabajaba para la CIA y fue juzgado en un tribunal de Teherán.
"Hemos visto este tipo de historias antes con el régimen iraní acusando falsamente a personas de ser espías y después reteniendo a extranjeros inocentes por razones políticas", advirtió el vocero adjunto del Departamento de Estado, Mark Toner.
El portavoz urgió a Irán a liberar a Hekmati "sin demora" y anotó que ese país ha rechazado las solicitudes de la embajada de Suiza en Teherán, que alberga la oficina de intereses estadounidenses, para visitar al supuesto espía.
Hekmati, que confesó ante la televisión iraní que trabajaba para la CIA, fue juzgado este martes en un tribunal de Teherán, según informó la agencia oficial de noticias iraní (IRNA).
De acuerdo con esa agencia, Hekmati volvió a reconocer en el juicio que trabajaba para la CIA y afirmó que lo engañaron y que su intención no fue atacar a Irán.
El juez anunció que la condena final será pública después de que el abogado defensor de Hekmati presente su alegato final.
El presunto agente de la CIA, de origen iraní y nacido en Arizona (EE.UU.), fue detenido a principios de diciembre en Irán cuando, según las autoridades, intentaba infiltrarse en el Ministerio de Inteligencia.