Decenas de chicos y chicas en varias regiones italianas, pero sobre todo en las septentrionales Piamonte y Lombardía decidieron acudir igualmente a sus colegios cerrados por la pandemia y asistir fuera a sus clases on line sentados en el suelo o en sillas llevadas de casa como protesta ante el cierre decretado por el Gobierno.
Los jóvenes se han adherido a una iniciativa llamada "Escuelas para el futuro" y en la que se invita a los estudiantes a manifestar así, siguiendo sus clases fuera de los centros, su malestar por los cierres.
El Gobierno italiano decretó que se limitase el 75 por ciento de la presencia en los institutos de toda Italia, mientras que en las regiones clasificadas de alto riesgo como Lombardia, Piamonte, Valle de Aosta y Calabria se ha cerrado desde el segundo curso de la educación secundaria.
Además también la región de Campania ha cerrado de manera autónoma sus colegios.
Hoy los alumnos de los institutos Gioberti y Calvino de Turín, en Piamonte, se armaron de sus ordenadores y tabletas y gracias a los móviles se conectaron para seguir las lecciones sentados en las aceras frente al colegio.
También decenas de estudiantes se reunieron ante la sede la región Lombardía, en Milán, para seguir sus clases.
La batalla de Anita
La primera que lanzó esta protesta fue Anita, de 12 años, de Turín, que desde hace días con algunos compañeros sigue las clases en las escaleras de la escuela secundaria Italo Calvino para pedir lecciones presenciales.
La batalla de Anita llegó hasta la ministra de Educación, Lucia Azzolina, quien este jueves llamó a la chica para asegurarle que su gesto "era admirable".
"Es muy bonito ver que hay niños que creen en sus ideas y las llevan adelante", dijo la ministra de Educación, y agregó que está haciendo "todo lo posible para mantener las escuelas abiertas y también permitir a los más mayores que regresen, teniendo en cuenta la situación epidemiológica ".
"Tengo dos hijos y estoy convencida de que las dos escuelas a las que asisten son lugares seguros", dijo la madre de Anita a la ministra Azzolina, pidiéndole "que siga luchando por escuelas abiertas".
"Le dije al ministro que la escuela es un lugar seguro y quiero volver", agregó la niña, según reportan los medios de comunicación.
La asociación "Prioridad a la escuela" que ha nacido en estos momentos de pandemia explicó que la iniciativa de seguir las lecciones frente a escuelas de toda Italia se repetirá todos los viernes.
Según una encuesta realizada por el sito internet Studenti.it, del grupo editorial Mondadori, en la que han participado 30.000 estudiantes de secundaria, los chicos se sienten "víctimas de un sistema que, a pesar de las promesas, no ha podido garantizar el regreso a la escuela".
"El 84 por ciento de los entrevistados por Studenti.it admite que se ven afectados negativamente por las nuevas medidas: en particular, de estas, el 20 por ciento de los encuestados afirma estar muy afectados psicológicamente incluso consideran estar "deprimidos".
Según un último estudio de la pagina Tuttoscuola, las nuevas medidas aplicadas por el Gobierno en las regiones de alto riesgo afectan a 362.000 profesores y 3,7 millones de alumnos.