Como demasiado masculina, fea y poco atractiva para ser violada: con estos argumentos un tribunal italiano absolvió en apelación a dos jóvenes condenados en primer grado por violar a una joven peruana, un caso que ha causado indignación en el país.
El ministerio de Justicia de Italia anunció que va a examinar la sentencia del tribunal de apelación de Ancona que anuló la condena a cinco y tres años de cárcel que se había dictado anteriormente para los dos acusados de haber drogado y violado a una joven de 22 años.
Los hechos se remontan a 2015 y tanto la víctima como los dos acusados son de nacionalidad peruana.
El tribunal de primera instancia condenó a los dos acusados, uno de ellos como cómplice, pero en 2017 el tribunal de apelación de Ancona, integrado por tres juezas, los absolvió haciendo suyos los argumentos de los supuestos abusadores.
Esto es, que la joven tenía un aspecto muy masculino, era fea y que no les gustaba para nada, hasta el punto de que el presunto autor de la violación la tenía registrada en su teléfono con el nombre de "vikingo".
La polémica sentencia fue anulada en Casación y el proceso de apelación deberá celebrarse de nuevo en la ciudad de Perugia.
Indignación
El caso ha provocado la indignación de colectivos feministas, que hoy organizaron un flashmob frente a la sede del tribunal de apelación.
"Temblad, temblad, las brujas están de vuelta", gritaban los manifestantes, que portaban carteles con mensajes como "verguenza, indignación, la magistratura necesita formación".
La protesta estaba organizada por la red feminista Rebels Network y otras organizaciones de defensa de los derechos humanos, que critican el lenguaje utilizado en las motivaciones de la sentencia que absolvió a los condenados.
"Estas palabras constituyen una nueva afrenta para la víctima. No tienen nada que ver con la búsqueda de la verdad", dijo Luisa Rizzitelli de Rebels Network.
Para el fiscal general de Ancona, Sergio Sottani, que impugnó la sentencia, se debe evitar que "las palabras que se utilizan puedan constituir una forma más de violencia contra la mujer".
Y rechazó que "la falta de atracción sexual del presunto violador por la víctima pueda representar un elemento en apoyo de la falta de responsabilidad".