Un tribunal nipón ordenó hoy miércoles nuevamente al Estado y la compañía propietaria de la central nuclear de Fukushima que indemnicen con 419 millones de yenes (3,3 millones de euros) a más de un centenar de evacuados por el accidente atómico de 2011.
La sentencia del Tribunal de Distrito de Yokohama es la quinta decisión de este tipo que establece la responsabilidad del gobierno de Japón en el desastre y la octava contra Tokyo Electric Power Company (Tepco), entre las aproximadamente 30 demandas colectivas interpuestas por desplazados y afectados por el accidente.
Un total de 175 personas, la mayoría de las cuales evacuaron a la prefectura de Kanagawa (cuya capital es Yokohama, al sur de Tokio) había solicitado una compensación combinada de 5.400 millones de yenes (unos 43 millones de euros) por daños ocasionados.
El fallo decretó indemnizar a 152 de los demandantes, que además de por la evacuación pedían una compensación por daños psicológicos ante "la pérdida de su ciudad natal" a raíz de la crisis nuclear desencadenada por el terremoto y tsunami del 11 de marzo de 2011.
El juez Ken Nakadaira señaló hoy en la sentencia, recogida por la agencia local de noticias Kyodo, que el accidente pudo prevenirse, ya que el gobierno pudo haberlo previsto desde septiembre de 2009 a partir de la proyección de los expertos de que un tsunami de esa índole podría golpear el área y provocar un apagón en la planta.
Según la argumentación de Nakadaira, ya desde finales de 2010 se podrían haber tomado medidas como instalar generadores de energía de emergencia que hubieran evitado el daño a los reactores centrales y las explosiones de hidrógeno que causaron la liberación de grandes cantidades de materiales radiactivos fuera de la planta.
El magistrado criticó al Estado por su juicio previo al desastre de que las medidas contra tsunamis adoptadas por Tepco eran apropiadas, lo que tildó de "error y fracaso", y acusó al gobierno de no haber ejercido adecuadamente su autoridad reguladora.
Las reacciones de los demandantes fueron variadas. Hiromu Murata, un evacuado de 76 años de la ciudad de Minamisoma, se alegró de que el fallo "reconocieran sus responsabilidades" en el accidente, mientras que para Kaoru Iwabuchi, quien tuvo que huir de Namie, la indemnización "infravalora nuestra pérdida", según Kyodo.