La Cancillería chilena manifestó este martes su "profunda consternación" por "la nueva operación militar israelí de gran envergadura" en la ciudad de Jenín, bastión de milicias palestinas en el norte de Cisjordania ocupada, que ha dejado de momento 12 muertos y centenares de heridos.
En un comunicado de prensa, el Ministerio de Relaciones Exteriores expresó "sus más sentidas condolencias a las familias de las víctimas" e instó "a todas las partes involucradas a respetar el derecho internacional humanitario y los derechos humanos, a cesar inmediatamente las hostilidades, y a deponer cualquier acción de fuerza de carácter unilateral, a fin de evitar un escalamiento en la espiral de violencia que afecte aún más a la población civil".
"Junto con condenar la violencia en todas sus formas, el Gobierno de Chile considera indispensable reimpulsar, con el apoyo de la comunidad internacional, el proceso de negociaciones directas y de buena fe entre ambas partes, conducentes a un acuerdo de paz justo, pleno y definitivo", añadió la Cancillería.
"Lo anterior, en el marco de la solución de los dos Estados, reconociendo el derecho de Israel y Palestina de coexistir en paz, dentro de fronteras seguras, acordadas mutuamente e internacionalmente reconocidas, en conformidad a las resoluciones adoptadas por las Naciones Unidas", concluyó.
La ciudad de Jenín en la Cisjordania ocupada fue escenario desde la madrugada del lunes de la mayor agresión israelí registrada desde 2002, con el uso de todo tipo de bombardeos aéreos y terrestres tras dos semanas de especulaciones sobre una gran campaña militar, sin precedentes en la zona desde la Segunda Intifada (2000-05).
La operación, bautizada "Casa y Jardín", ha causado al menos 12 muertos, más de un centenar de heridos y 3.000 desplazados en menos de cuatro días.