El primer ministro Edhud Olmert decidió aplicar medidas políticas ante el ataque suicida que causó nueve muertos y unos 40 heridos el pasado lunes.
El primer ministro designado de Israel, Ehud Olmert, decidió limitar la respuesta inmediata al atentado de Tel Aviv a medidas políticas, que se concretan en la revocación del permiso de residencia en Israel a tres diputados de Hamas que viven en Jerusalén este.
Un portavoz del Gobierno israelí, Raanán Guissin, informó que el Ejecutivo, reunido este martes para decidir qué respuesta dar al atentado suicida que causó el lunes 17 de abril nueve muertos y unos 40 heridos, ha decidido "revocar el permiso de residencia de los tres legisladores de Hamas de Jerusalén este, con todo lo que eso implica".
Tras esa decisión, los diputados perderán los derechos sociales adquiridos en Israel y deberán seguramente mudarse a Cisjordania.
Guissin agregó que Israel seguirá luchando contra el terrorismo, "como hacemos siempre, adaptando las operaciones a la amenaza".
Para el Gobierno israelí no hay diferencia entre el Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamas) y la Yihad Islámica, que el lunes se atribuyó la autoría del atentado.
"Seguiremos persiguiendo a los terroristas y combatiendo el terror sin tener en cuenta la afiliación", dijo el portavoz y añadió que el Gobierno palestino está dirigido por una entidad terrorista.
Recalcó asimismo que "Israel siempre distingue entre éstos y otros palestinos, mantiene abiertos canales de comunicación y no descalifica al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abas".
Señaló, no obstante, que, pese a que Hamas dirija el Gobierno, el presidente de la ANP tiene "autoridad para combatir el terrorismo".
La Yihad Islámica asumió la autoría del atentado suicida registrado el lunes en Tel Aviv, según indicó un informante anónimo de esa organización palestina a la radio pública israelí.
La detonación se produjo cerca de una estación de autobuses de la capital judía y causó al menos nueve muertos y unos cuarenta heridos. (EFE)
