El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aseguró este sábado que la guerra en la Franja de Gaza contra el grupo islamista Hamás continuará "hasta el final", y que ésta no se va a ver frenada ni por el proceso abierto por genocidio contra Israel en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, ni por las amenazas del "eje del mal".
Antes de que se cumplan cien días del conflicto bélico contra el grupo terrorista, Netanyahu afirmó en una declaración televisada a la nación que "la guerra no parará ni por La Haya ni por las amenazas del eje del mal".
Netanyahu se refirió repetidamente al "eje del mal", donde enmarcó a Hamás e incluyó a la milicia chií libanesa Hizbulá y a los hutíes de Yemen, grupos apoyados por Irán y que en los últimos meses han lanzado numerosos ataques hacia Israel en apoyo a los palestinos de Gaza.
"Estamos en el camino de la victoria y no pararemos hasta conseguirla. No hay nada que nos comprometa ni nadie que pueda detenernos", afirmó el mandatario isaraelí, quien prometió más presupuesto para financiar la guerra.
En relación al proceso por genocidio abierto en la CIJ, Sudáfrica demandó a Israel y pidió medidas cautelares para un alto el fuego inmediato en la Franja de Gaza, donde ya han muerto más de 23.800 personas en casi cien días de guerra.
De hecho, la semana pasada la Cancillería de Chile confirmó que sus servicios jurídicos y diplomáticos se encuentran preparando los documentos para sumarse a la denuncia de Sudáfrica contra Israel.
El discurso de Netanyahu se emitió minutos antes de que comenzara en Tel Aviv una protesta de 24 horas, con motivo de los cien días de guerra, impulsada por las familias de los secuestrados para reclamar al gobierno que haga lo que sea necesario para traerlos lo antes posible de vuelta a casa.