Ofensiva de uniformados continuaría para expulsar a los radicales.
Muertes se suman a otra decena provocada por bombardeo aliado.
Los enfrentamientos causaron también heridas a decenas de yihadistas.
Un total de 143 combatientes del grupo yihadista Estado Islámico (EI) murieron este domingo en bombardeos y enfrentamientos con las fuerzas armadas y de seguridad iraquíes en varias zonas del país, informó a Efe una fuente de seguridad.
De entre los fallecidos, 82 murieron en choques con la policía iraquí en las zonas de Al Tash y Al Buali al Yasim, al sur y al norte de la ciudad de Ramadi, capital de la provincia occidental de Al Anbar, precisó la fuente, que no informó de las bajas en las filas gubernamentales.
La fuente, que pidió el anonimato, aseguró que los servicios de seguridad continuarán sus operaciones hasta expulsar a los hombres armados de la provincia.
En la misma región, la coalición internacional liderada por Estados Unidos que lucha contra el EI, bombardeó bases de los yihadistas cerca de la localidad de Al Karma, al oeste de Bagdad, lo que causó la muerte de 11 personas.
Además, otros 30 extremistas murieron en un bombardeo de la aviación de la coalición internacional en la zona de Majmur, 90 kilómetros al sureste de la ciudad de Mosul, capital de la provincia septentrional de Nínive.
