La ONG israelí Paz Ahora (Shalom Ajshav), denunció que Israel asignó unas 118 hectáreas para la planificación de un nuevo asentamiento judío cerca de la ciudad Palestina de Belén, en el territorio ocupado de Cisjordania.
El gobierno israelí informó hace unos días al Tribunal Supremo de que ha adjudicado esta amplia extensión de tierra al sur de Belén, cerca de la localidad de Al Nahla, al Ministerio de Vivienda, con el fin de planificar la construcción de una nueva colonia llamada Guivat Eitam, publicó Paz Ahora.
El reparto, que se hará efectivo en los próximos 30 días, "supone un paso altamente significativo" en la promoción de un plan conocido como "E2", señala la ONG, y advierte que de ser implementado "podría partir en dos el sur de Cisjordania y destruir las posibilidades para la solución de los dos estados", uno israelí y otro palestino.
El Ministerio de Vivienda israelí comenzó hace varios años la preparación de una iniciativa para crear 2.500 unidades de vivienda en la zona, "pero era un plan preliminar lejos de ser implementado, como muchos en Israel y los territorios", expuso la ONG.
"La importancia de asignar el terreno ahora al Ministerio de Vivienda para planificar es que será posible preparar en unos pocos meses o pocos años un plan detallado para ser aprobado por las instituciones de planificación, y después será posible comenzar la construcción", alertó.
La presencia de Israel en la zona
Hace unos días la misma organización denunció que Israel sacó en 2018 a licitación un número récord de viviendas en colonias de Cisjordania, una tendencia al alza por las políticas del gobierno de coalición israelí y la llegada de Donald Trump a la presidencia de EE.UU.
"No es casualidad que éste y otros comunicados sobre asentamientos de los últimos días se han hecho durante las vacaciones de Navidad, cuando todo occidente está de vacaciones, e inmediatamente después de que se anunciaran las elecciones israelíes", arremetió la agrupación.
Para la comunidad internacional, "el establecimiento de asentamientos por parte de Israel en el territorio palestino ocupado desde 1967, incluida Jerusalén Oriental, no tiene validez legal y constituye una flagrante violación del derecho internacional y un obstáculo importante para el logro de la solución biestatal y de una paz general, justa y duradera".