Policía palestina logró desalojar toma de milicianos en alcaldía de Belén
Las fuerzas de seguridad de la ANP rodearon el edificio y obligaron a los ocupantes a salir sin que se produjeran hechos de violencia.
Las fuerzas de seguridad de la ANP rodearon el edificio y obligaron a los ocupantes a salir sin que se produjeran hechos de violencia.
La toma de la alcaldía de Belén protagonizada este martes por un grupo de milicianos de las "Brigadas de Al Aksa", facción armada vinculada a Al Fatah, concluyó con la evacuación de los insurgentes del municipio, informaron testigos presenciales.
Más de 40 hombres armados irrumpieron esta mañana en la sede de la alcaldía de Belén y se subieron al tejado apuntando con sus armas en dirección a la Plaza del Pesebre, para protestar por su situación de desempleo y para instar a que se liberen presos palestinos encarcelados en Israel.
Los testigos dijeron que una de las demandas de los milicianos fue la de que la Autoridad Nacional Palestina (ANP) liberara a un preso detenido en Belén hace dos meses y encarcelado en una prisión de Jericó.
El gobernador de Belén, Salah Tamary, condenó el incidente, del que dijo "que fue llevado a cabo por personas sin principios y que no pertenecen a la ciudad santa de Belén y que sólo pretenden arruinar los festejos de la Navidad".
Tras penetrar en el Ayuntamiento de la ciudad, las fuerzas de la seguridad palestina evacuaron de civiles la Plaza del Pesebre, donde está ubicado, y rodearon el edificio de la alcaldía.
Cientos de agentes de policía tomaron posiciones en la Plaza y en sus alrededores.
Los atrincherados exigieron asimismo trabajo y protección a la ANP para unos 300 hombres y que han presentado una lista de demandas a las autoridades.
Entre ellas destaca el pago de los sueldos que le garantizó el gobierno del presidente palestino, Mahmud Abás, por dejar de atacar a Israel.
La alcaldía se encuentra en la Plaza del Pesebre, junto a la Basílica de la Natividad, centro del cristianismo en estas fechas porque la tradición sitúa allí el nacimiento de Jesús.
Belén está estos días en medio de los preparativos para la Misa del Gallo y la Nochebuena, y por ello es uno de los principales centros de atracción turística por estas fechas.
"Aquel que busca destruir las festividades navideñas no puede alegar (en su defensa) ningún principio ni interés nacional", afirmó el alcalde de Belén, Victor Batarsa.
Hace meses el presidente Abás prometió a los milicianos de las Brigadas que se incorporarían a sus fuerzas de seguridad, como garantía de empleo y una vía para garantizar el alto el fuego con Israel.
Pero problemas presupuestarios en la ANP han impedido la contratación de una gran parte de los milicianos, que han decidido llamar la atención de la opinión pública internacional mediante la toma de alcaldía en la ciudad que vio nacer a Jesús. (EFE)