El presidente sirio, Bachar al Asad, aseguró este domingo que la intervención rusa en su país "escribe una nueva historia porque esa guerra determinará el futuro de la región y del mundo".
En una reunión con una delegación de parlamentarios rusos en Damasco, Al Asad subrayó también que "la erradicación de las organizaciones terroristas conducirá a una solución política", según las declaraciones difundidas por la agencia oficial siria SANA.
El mandatario sirio agradeció el apoyo de Moscú e hizo hincapié en la importancia de consolidar las relaciones bilaterales, en concreto en el ámbito de la lucha antiterrorista y en el reparto de ayuda humanitaria.
Por su parte, la delegación rusa, encabezada por Sergei Gavrilov, destacó que los esfuerzos de Al Asad establecen "los cimientos para restaurar la paz y la estabilidad en Siria".
Además, de acuerdo a lo publicado por SANA, los diputados rusos indicaron que la lucha es "contra un enemigo común y la victoria es incuestionable".
Rusia, firme aliada de Al Asad, comenzó su campaña de bombardeos en territorio sirio el 30 de septiembre pasado, en su primera intervención militar directa en este país desde el estallido del conflicto en 2011.
El objetivo de esos ataques son los grupos extremistas, como el Estado Islámico y el Frente al Nusra, pero crecen las denuncias de que los bombardeos están golpeando también a los civiles y a los rebeldes moderados.
El Kremlin aseguró el pasado día 21 que la prioridad ahora en Siria es derrotar al terrorismo y que el arreglo político está en un segundo plano, tras la reunión mantenida el día antes en Moscú por el presidente, Vladímir Putin, con Al Asad.