Más de 230 legisladores del PRI adquirieron el producto de Apple en más de 110.000 dólares.
La medida provocó el rechazo de otros parlamentarios y la ciudadanía.
La compra de Ipads con dinero público para más de 230 diputados mexicanos en medio de su reunión anual en un lujoso hotel de playa generó este jueves críticas desde la cámara baja y desde la ciudadanía, por considerarse un derroche.
El grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI), fuerza mayoritaria en la Cámara aunque en la oposición, gastó 1,5 millones de pesos (unos 113.630 dólares) en el último "gadget" táctil de Apple, que llegó a México en fecha reciente.
El coordinador de la bancada priísta, Francisco Rojas, declaró que el uso de este aparato, cuyo coste por unidad oscila entre 600 y 850 dólares, es indispensable para el trabajo de los legisladores mexicanos. "Ahí vamos a tener toda la información del Congreso, todos los instrumentos jurídicos que se requieren estar consultando casi a cada momento", aclaró."Quien no cuenta con una computadora se vuelve un analfabeto funcional", añadió Rojas.
De los 237 legisladores priístas -en la Cámara hay 500 diputados en total-, sólo tres rechazaron el aparato por contar ya con el suyo, explicó a un portavoz de la formación política.
Las críticas
El PRI "debe dar una explicación más detallada del por qué lo hizo de esa forma y no se les pidió a los propios diputados que desembolsaran su propio dinero para su aparato", indicó el vicecoordinador de Acción Nacional (PAN), Carlos Pérez Cuevas.
Los legisladores recibieron su regalo ayer, en el marco de la reunión plenaria que celebran desde el lunes y hasta hoy en el balneario de Ixtapan de la Sal (Guerrero, sur del país), bañado por las aguas del Pacífico y tradicional destino de playa.
El descontento ciudadano se ha hecho visible a través de Twitter, donde se ha colocado hoy como cuarto tema más comentado. Los internautas han sugerido diferentes usos para el Ipad de los diputados.
Entre ellos, los usuarios de la red social opinan que los diputados priístas ocuparán su tiempo jugando a los populares Farmville y Mafia Wars, si es que son capaces de averiguar como funciona el aparato.
