El Gobierno de México subastará el próximo domingo 23 de junio cerca de 30 inmuebles, muchos de ellos confiscados al crimen organizado, con los que espera recaudar 168,4 millones de pesos mexicanos (unos 8,8 millones de dólares) para ayudar a comunidades pobres.
El próximo domingo se van a subastar "terrenos y viviendas, que se va a destinar lo que se obtenga para municipios pobres de la montaña de Guerrero (sur de México)", informó este lunes el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
Ricardo Rodríguez Vargas, director general del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), detalló que esperan recaudar cerca de 8,8 millones de dólares con unos 27 inmuebles a concurso.
La subasta se divide en dos bloques. El primero contempla 15 inmuebles -desde ranchos en el centro de México a lujosas casas en el balneario turístico de Los Cabos- considerados "de abandono".
"Son inmuebles de alto valor y motivo de diversos procesos judiciales. En particular, sobre todo, de delincuencia organizada y delitos contra la salud (narcotráfico)", apuntó el titular del SAE.
El segundo bloque contempla 12 bienes, uno de ellos en situación de "decomiso" y los otros 11 en "extinción de dominio", es decir, en medio de un proceso mediante el cual el Estado persigue los bienes de origen o destino ilícito a través de una vía judicial.
El dinero recaudado en la venta de estos inmuebles será empleado por el Poder Judicial, la Fiscalía General de la República (FGR), la Secretaría de Salud (SS) y un fondo de atención a las víctimas.