El rey Juan Carlos y el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, vuelan este miércoles a Santiago para participar en la XVII Cumbre Iberoamericana, en la que España defenderá la necesidad de compaginar el crecimiento económico con las políticas sociales.
En esta ocasión, la Reina Sofía no acudirá a la cita de los jefes de Estado o de Gobierno iberoamericanos por encontrarse afectada por una gripe, según informaron fuentes de la Casa Real.
Normalmente, la Reina asiste a estas cumbres, en las que lleva a cabo actividades paralelas de tipo social y cultural con las primeras damas de los distintos países iberoamericanos.
En el encuentro que se celebrará en la capital entre el jueves y el sábado próximos, está previsto que participe la práctica totalidad de los máximos mandatarios de los 22 países participantes.
Entre las propuestas de la delegación española para esta Cumbre está la posibilidad de crear un "Fondo iberoamericano de cohesión" que estaría diseñado a partir de la experiencia de la Unión Europea (UE) en este ámbito.
Según fuentes del Ejecutivo español, Zapatero podría también anunciar la próxima creación de un Fondo iberoamericano para el acceso al agua potable, proyecto que surgió en la XVI Cumbre, celebrada en Montevideo (Uruguay), y que contaría con financiación española.
En un encuentro con los medios de comunicación, la secretaria de Estado para Iberoamérica, Trinidad Jiménez, destacó como uno de los mayores avances de la próxima cita en Chile la firma del Convenio iberoamericano de Seguridad Social.
Ese acuerdo, calificado de "histórico" por la delegación española, permitirá a los trabajadores migrantes unificar al final de su vida laboral todas las aportaciones realizadas en los distintos países iberoamericanos a efectos de computar el periodo exigido para obtener una pensión.
El texto deberá ser ratificado por cada uno de los países y, entre otros, favorecerá al colectivo de 615.439 españoles que trabajan en los países de la comunidad iberoamericana (sin contar a Portugal) y al millón de trabajadores iberoamericanos que residen en España.
El lema elegido para la Cumbre de Santiago de Chile es "Cohesión social y políticas sociales para alcanzar sociedades más inclusivas en Iberoamérica", cuestión crucial para la región que registra la mayor desigualdad del mundo y en la que viven 20 millones de pobres.
Rodríguez Zapatero sostendrá en la reunión que, si bien el crecimiento económico no basta, sin ese crecimiento no habrá recursos para fomentar la cohesión.
Mostrará además su convicción de que las políticas sociales no consumen riqueza sino que ayudan a crearla, y presentará los avances democráticos como condición para la cohesión.
En la Cumbre, junto a la tradicional declaración final, se aprobará un Plan de acción sobre cohesión social con objetivos definidos que abordará, entre otros asuntos, la educación, la reforma fiscal y la lucha contra la corrupción.
En el marco de la Cumbre, Rodríguez Zapatero mantendrá reuniones bilaterales con la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, y con los máximos mandatarios de Ecuador, Rafael Correa; Perú, Alan García; y Costa Rica, Oscar Arias.
La delegación española no descarta que pueda entrevistarse también con el representante del Gobierno cubano y con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez. (EFE)