Autoridades de la Fiscalía paraguaya, el Ministerio de Justicia y la Secretaría Antidrogas frustraron el intento de fuga de un ciudadano chileno, Carlos Orlando Messina Vidal, alias "Gringo", preso en el país desde 2014 y presuntamente vinculado con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el grupo armado Comando Vermelho de Brasil.
Las autoridades paraguayas lo consideran el principal proveedor de drogas para el Comando Vermelho, y afirman que posee conocimientos en guerra de guerrillas y fabricación de explosivos, después de que entrara en contacto en Colombia con miembros de las FARC.
Según las investigaciones, el hombre estaba asentado en Paraguay para el manejo de transacciones ilícitas relacionadas con el tráfico de drogas, armas, secuestros y demás actos violentos a favor del Comando Vermelho de Brasil.
Fue detenido en 2014 en un procedimiento en el que la Policía paraguaya desarticuló un laboratorio clandestino de procesamiento de drogas e incautó de diversas armas de guerra.
Desde entonces se encontraba detenido en la penitenciaría regional de la ciudad sureña de Encarnación, hasta su intento de fuga este sábado, tras el cual fue recluido en un área de seguridad de la penitenciaría de Tacumbú, situada en Asunción.
Está previsto que permanezca en esta institución, la mayor prisión del país, hasta que cumpla su pena por los delitos cometidos en Paraguay, antes de quedar a disposición de los países que le requieren para su extradición.
De las mayores organizaciones criminales de Brasil
En mayo de 2013, la Policía paraguaya detuvo a cinco presuntos miembros del Comando Vermelho en el departamento de Amambay, fronterizo con Brasil.
En diciembre de 2014, arrestó además a uno de los jefes de esta organización criminal, considerado el prófugo más buscado de Brasil.
La Secretaría Antidrogas de Paraguay considera al Comando Vermelho responsable, entre otros delitos, del tráfico de drogas y armas en la zona fronteriza, en cuyas zonas boscosas abundan los cultivos ilegales de marihuana.
El Comando Vermelho es una de las mayores organizaciones criminales de Brasil, dedicada al narcotráfico y al tráfico de armas.
La organización opera desde las cárceles de Río de Janeiro y en muchas de las favelas de la ciudad, según las autoridades.