Corea del Norte ha indicado a Estados Unidos que no acudirá a la próxima ronda de diálogo multilateral sobre su programa nuclear hasta que Washington no negocie con Pyongyang la retirada de sanciones económicas impuestas al régimen comunista, informó la prensa japonesa.
Según publicó el diario Sankei, que cita fuentes diplomáticas en Nueva York, un representante de la misión permanente de Corea del Norte ante Naciones Unidas comunicó a la Casa Blanca que su país no volverá de momento a las negociaciones a seis bandas de Pekín.
Como condición para el retorno al diálogo, indicaron las fuentes, Corea del Norte exige que se reúnan los máximos representantes de las delegaciones norcoreana y estadounidense encargadas de negociar sobre el programa nuclear para abordar antes la eventual retirada de las sanciones financieras impuestas por Estados Unidos a ese país.
En septiembre pasado, el Departamento del Tesoro de norteamericano indicó que el Banco Delta Asia SARL, registrado en Macao, estaba implicado en operaciones de blanqueo de dinero y había trabajado para agencias gubernamentales y empresas norcoreanas durante cerca de 20 años.
La sospecha es que tal dinero procedía del tráfico de drogas y de falsificación de moneda.
El 21 de octubre, Estados Unidos bloqueó ocho entidades norcoreanas a las que acusó de estar relacionadas con la proliferación de armas de destrucción masiva y congeló todas las cuentas bajo jurisdicción estadounidense.
También se prohibió cualquier tipo de transacción entre ciudadanos de Estados Unidos y estas entidades, según informó entonces el Departamento del Tesoro.
Las conversaciones multilaterales sobre el programa nuclear de Corea del Norte se pusieron en marcha en agosto del 2003, después de que en octubre del año anterior Pyongyang reconociera que estaba en el camino de conseguir armas atómicas.
En febrero pasado, la tensión se disparó cuando Corea del Norte reconoció que había logrado ya desarrollar armas atómicas.
La quinta ronda de las conversaciones (en las que participan ambas Coreas, Estados Unidos, China, Rusia y Japón) comenzó a principios del pasado noviembre y su reanudación depende de la solución de las diferencias que existen entre Washington y Pyongyang.
Aunque en la cuarta ronda de diálogo, concluida en septiembre, se alcanzaron algunos compromisos para la desnuclearización de la península coreana, sin embargo, en las conversaciones de noviembre las espadas estaban en alto y la brecha se ahondó entre las delegaciones de Estados Unidos y Corea del Norte.
Así, el 10 de noviembre, segundo día de las últimas conversaciones de Pekín, el jefe de la delegación norcoreana, Kim Kye-gwan, dijo que no trataría la desnuclearización de la península hasta que Washington no retirara las sanciones.
Uno de los negociadores japoneses indicó que esa postura, que arruinó las conversaciones de ese día, partió directamente de la cúpula dirigente norcoreana en Pyongyang.
La quinta ronda de diálogo terminó así sin objetivos concretos y con el único compromiso de reunir a las partes en breve, aunque, según han adelantado los expertos, la nueva fase de conversaciones no será antes de enero próximo, si es que se produce.
Ya en septiembre del 2004, Corea del Norte boicoteó el diálogo y estuvo cerca de un año sin reunirse con sus interlocutores, espera que aprovechó para acelerar su fabricación de bombas atómicas y anunciar que ya disponía de este tipo de armamento. (EFE)