"Tenemos preocupaciones más directas y más graves en esta crisis", dijo el canciller chino.
Barack Obama criticó su pasividad frente al conflicto que protagoniza Seúl, su principal aliado.
El ejecutivo chino defendió este martes la política que mantiene con el régimen norcoreano, del que es el principal aliado político, en el conflicto con Corea del Sur después de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, criticara su pasividad.
"Nuestros sentimientos son completamente diferentes de los de aquellos países lejos de la región. Tenemos preocupaciones más directas y más graves en esta crisis", señaló el portavoz de turno del ministerio chino de Relaciones Exteriores en rueda de prensa.
China evitó pronunciarse por el hundimiento en marzo del navío norcoreano "Cheonan", en el que murieron 46 tripulantes y que según una investigación internacional fue torpedeado por Corea del Norte.
El presidente Obama dijo en el marco de la cumbre del G20 celebrada el pasado fin de semana en Toronto, que abordó la crisis coreana en sus encuentros con su homólogo chino, Hu Jintao, al que acusó de practicar una especie de "ceguera" con el régimen de Kim Jong-il.
En este sentido, el portavoz Qin añadió que su gobierno no se decanta por ninguna de las partes implicadas en el conflicto desencadenado por el hundimiento del "Cheonan".
"La posición y los esfuerzos de China no merecen ninguna acusación", respondió Qin, quien añadió que su gobierno "no hace nada para atizar el fuego".
El régimen chino se opone a la aplicación de sanciones en las reiteradas crisis desencadenadas por Corea del Norte, sobre la que aparentemente tiene una cierta capacidad de presión que cada vez es más cuestionada por los analistas locales e internacionales.
El portavoz chino reiteró que el objetivo de su gobierno es mantener la paz y la estabilidad en la Península Coreana y manejar las crisis con diplomacia y con la vista puesta en la desnuclearización de Corea del Norte a través del formato del diálogo multilateral amparado por Pekín desde 2003.
