Los lesionados se registraron tras enfrentamientos con la policía en la provincia de Lucanas, en el sur del país vecino.
Los pobladores y las autoridades de la zona exigen el cierre definitivo de cuatro minas.
Al menos diez personas resultaron heridas y un campamento minero fue destruido durante un enfrentamiento entre manifestantes y agentes de la Policía en el sur de Perú, informaron este sábado medios locales.
Los incidentes se produjeron este viernes durante las protestas de pobladores contra empresas mineras en el distrito de Chaviña, en la provincia de Lucanas, de la región Ayacucho.
Al respecto, el director de la red de salud de la localidad de Cora Cora, Hernán Pretell, informó a la emisora RPP Noticias que las diez personas fueron atendidas en el hospital local de heridas causadas por perdigones.
La emisora añadió que fuentes en esa localidad le informaron que también fueron quemados al menos 20 vehículos de la unidad minera Apumayo.
Según la información, los pobladores de las provincias de Lucanas, Paucar Del Sara Sara y Parinacohas, en Ayacucho, protestan contra las mineras Apumayo SAC y Ares SAC, a las que acusan de contaminar las cabeceras de los recursos hídricos de la región.
Al respecto, el general de la Policía Nacional José Zapata señaló que los agentes no usaron armas de fuego ni de largo alcance, pero si gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes, que lanzaron piedras y objetos contundentes.
En tanto, el diario El Comercio señaló que unas 500 personas "invadieron e incendiaron" las instalaciones de la minera aurífera Apumayo, donde destruyeron un campamento con oficinas administrativas, vehículos y otras instalaciones.
El gerente de Apumayo, Guillermo Shinno, aseguró al diario que los manifestantes no viven en la zona de influencia de la mina y dijo que su empresa defiende "el diálogo con las comunidades".
La minera agregó, en un comunicado, que sus trabajadores tuvieron que dejar la zona por medidas de seguridad y pidió a la población dialogar y no caer en "provocaciones o medias verdades por parte de terceros".
El Comercio aseguró que, posteriormente, otro grupo de manifestantes llegó hasta la mina Breapampa y quemó un taller de mantenimiento mecánico, aunque luego se retiró de ese lugar.
Tras estos enfrentamientos, el jefe de la Defensoría del Pueblo en Ayacucho, David Pacheco, informó que los manifestantes decidieron levantar su paralización durante la noche del viernes, luego de reunirse con representantes del Ministerio de Energía y Minas.
Los pobladores y las autoridades locales exigen el cierre definitivo de las minas Apumayo, Inmaculada (Ares), Breapampa y Pallancata, mientras que la Fiscalía busca identificar a los responsables del ataque a las instalaciones mineras.
