El encarcelado ex presidente de Perú, Alberto Fujimori, volvió este sábado a su celda después de que este viernes fuera trasladado a una clínica de Lima, donde fue sometido a una resonancia vertebral y a una endoscopia, informó su médico personal, el ex congresista fujimorista Alejandro Aguinaga.
Fujimori fue trasladado a la clínica Centenario Peruano Japonesa, situada en el céntrico municipio limeño de Jesús María, tras una recaída de los males crónicos que padece, que son molestias en la columna, una gastritis y unas lesiones en la lengua, conocidas como leucoplasia, de las que fue operado hasta en cinco ocasiones.
Alejandro Aguinaga aseguró que los médicos han ordenado al ex mandatario guardar reposo durante una semana para recibir posteriormente tratamientos más específicos en su celda, situada en la base de la Dirección de Operaciones Especiales (Diroes) de la Policía, en el este de Lima.
La recaída en el estado de salud de Fujimori, de 78 años, ocurrió dos días después de que reivindicara con orgullo el "autogolpe" de Estado que dio en 1992, en el día del vigésimo quinto aniversario de esa acción, en el que disolvió el Congreso, instauró un "Gobierno de emergencia y reconstrucción nacional" y secuestró a un periodista.
Con una serie de mensajes en Twitter, el encarcelado ex presidente se proclamó el "arquitecto" de la democracia actual de Perú, y afirmó que el "autogolpe" "valió la pena porque para hacer tortillas hay que romper huevos".
El ex presidente fue condenado en 2009 a 25 años de prisión por las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, cometidas por el grupo militar encubierto Colina, y los secuestros de un periodista y un empresario en 1992.