El primer ministro de Perú, Aníbal Torres, reveló que el presidente Pedro Castillo tenía planeado presentar este martes ante el pleno del Congreso un proyecto de ley para el adelanto de las elecciones generales en su país, pero finalmente retrocedió para dar "un último intento a la concertación".
Según declaró Torres a periodistas, Castillo optó por el diálogo y por "corregir" la "inestabilidad" que afronta su país por la escalada de tensiones entre el Ejecutivo y el Legislativo, antes de apostar por una nueva convocatoria a comicios generales durante la comparecencia que hizo ante el hemiciclo peruano.
"Han existido muchos anuncios del presidente, pero ha faltado un anuncio que a última hora él decidió no hacer. Me manifestó: 'doctor, vamos haciendo un último intento por la concertación en el Congreso, para corregir esta inestabilidad política que existe", reconoció el jefe del gabinete ministerial.
Castillo concurrió al pleno del Parlamento este martes para brindar un inusual mensaje en medio de la admisión a trámite de una moción que pide que sea destituido del cargo.
La cita había generado grandes expectativas luego de que Torres anunciara que habría "sorpresas" y corrieran rumores sobre la posible presentación de un proyecto de ley para adelantar las elecciones generales en el país, algo que finalmente no se dio.
LOGROS Y DESACIERTOS DE SU ADMINISTRACIÓN
El mandatario aprovechó la ocasión para presentar los logros y metas de sus casi ocho meses de gestión y deslindarse "enérgicamente" de las acusaciones en su contra por parte de "sectores mediáticos y políticos" que lo vinculan con supuestos actos de corrupción.
Durante su discurso, Castillo reconoció "errores y desaciertos", pero negó con firmeza haber incurrido en faltas a la probidad, lo que atribuyó a un intento "sistemático" de un sector de la oposición por cuestionar su legitimidad.
En ese sentido, acusó a un grupo de opositores de "no aceptar" su triunfo electoral y dedicarse a impulsar un "intenso y sistemático trabajo" destinado supuestamente "a obstruir las labores del Ejecutivo con el único propósito de vacar al presidente, o encontrar mecanismos para recortar su mandato".
Con el objetivo de poner fin a las "tensiones y enfrentamientos" entre los dos poderes del Estado, Castillo hizo un llamado a buscar "puntos de coincidencia y consensos" para satisfacer las demandas de los ciudadanos y revertir la "crisis institucional dañina y perniciosa" que afronta su país.
"Es el momento de poner fin a las disputas mezquinas y trabajar por los grandes objetivos nacionales. Es momento de acabar con la polarización y la incertidumbre, que impiden nuestro crecimiento, progreso y desarrollo", emplazó.
El pronunciamiento de Castillo en el hemiciclo peruano se dio un día después de que los legisladores acordaran, por una sorpresiva avalancha de votos, someterlo a un juicio político, que se resolverá el próximo 28 de marzo, el que según sus impulsores, se fundamenta en una serie de "hechos objetivos" que ameritan su destitución por "permanente incapacidad moral".