Los enfrentamientos entre agricultores que se oponen a las concesiones mineras y la policía dejaron al menos ochenta heridos, dos de ellos de gravedad, en la región sur andina de Apurímac, informaron medios locales.
Los choques se produjeron después de que fracasara el diálogo iniciado el jueves por una comisión gubernamental que llegó a la zona presidida por el ministro de Agricultura, Miguel Caillaux.
La agencia oficial Andina informó luego de que los enfrentamientos dejaron unos 80 heridos, 15 de los cuales son policías, y anunció que en las próximas horas llegarán a Andahuaylas más refuerzos de las fuerzas de seguridad.
Además, el Ministerio de Salud enviará un equipo médico para apoyar la labor de los médicos de Andahuaylas.
Sin embargo, otros medios locales señalaron que los enfrentamientos habían dejado hasta tres muertos, lo que fue negado por el jefe de la Policía de Andahuaylas, el coronel Efraín Barragán.
"Es absolutamente falsa esa información, en la actualidad hay 6 heridos por parte de los manifestantes y 16 por parte de la Policía Nacional", declaró Barragán al noticiero de la cadena local América Televisión.
El jefe policial señaló que ya se restableció la energía eléctrica en Andahuaylas, que había sufrido un apagón al inicio de la noche, y que el acceso a la ciudad está bloqueado.
"La zona está controlada por la policía. Estamos patrullando la ciudad para evitar acciones de vandalismo, pero la situación está controlada, no hay ninguna novedad al respecto", acotó.
Después de que la comisión enviada por el Gobierno abandonara la ciudad sin cerrar un acuerdo, los agricultores en huelga desde hace 8 días iniciaron una protesta violenta que fue respondida por la policía con gases lacrimógenos y disparos al aire.
Sin embargo, las protestas violentas continuaron por la noche, cuando se produjo el apagón en Andahuaylas y una turba incendió unas oficinas del Gobierno regional.