Ambos políticos, que compitieron en las elecciones de 2011, son investigados por lavado de dinero.
La empresa dio tres millones de dólares a la campaña de Humala y 500 mil dólares a Keiko.
El ex director de la empresa Odebrecht para Latinoamérica y el Caribe, Luiz Mameri, corroboró los aportes de esa constructora brasileña a las campañas electorales del ex presidente peruano Ollanta Humala y Keiko Fujimori en 2011, afirmó el portal de noticias IDL Reporteros.
Mameri respondió hoy en Sao Paulo a un interrogatorio con los fiscales peruanos Germán Juárez y José Domingo Pérez, que investigan por presunto lavado de dinero a Humala y a la líder opositora, a raíz de los supuestos aportes irregulares a sus campañas electorales.
El ex directivo dijo que recibió una llamada de Marcelo Odebrecht, dueño de la compañía, en la que le ordenó hacer un aporte de tres millones de dólares a la campaña de Humala en el 2011, comicios que ganó a Fujimori, según las fuentes consultadas por el portal de noticias.
Mameri debía aprobar todos los pagos "no contabilizados" con fondos de la oficina de Operaciones Estructuradas, pero al comunicarle la orden al entonces superintendente de Odebrecht en Perú Jorge Barata, éste se opuso, indicó IDL Reporteros.
Aparentemente, Barata se opuso porque se trataba de "cifras exorbitantes" y habló sobre la reacción de los otros candidatos peruanos.
Finalmente, Mameri contó, según afirmó el portal peruano, que en una conferencia tripartita con Marcelo Odebrecht y Barata se acordó también entregar 500.000 dólares a la campaña de Keiko Fujimori.
No obstante, Mameri "no recordó si su orden fue pagar 500.000 dólares a Keiko Fujimori o aumentar los 500.000 a una cifra previa. Pero sí tiene claro que él autorizó el pago", señaló el medio.
Actualmente, Humala y su esposa Nadine Heredia están a la espera de que el Tribunal Constitucional resuelva su recurso de hábeas corpus para recuperar su libertad y poder seguir el proceso en su contra en comparecencia.
En tanto, Keiko Fujimori es investigada por presunto lavado de activos por el aporte no declarado de empresas durante sus últimas campañas electorales, entre las que se encuentra Odebrecht a raíz de una anotación en el teléfono móvil de su dueño.
