El presidente sostuvo que la solicitud de destitución está basada en "una mentira que no existe".
"Siempre he actuado conforme a la ley y a la ética profesional", recalcó.
"Está en juego la estabilidad democrática", recalcó el mandatario.
El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, pidió a los congresistas del país, que decidirán este jueves sobre el pedido de destitución del mandatario, que no apoyen la estrategia de un sector basada en "una mentira que no existe", al reiterar que no ha mentido, ni cometido un acto de corrupción.
Durante su defensa ante el pedido de destitución, el jefe de Estado afirmó que "hay quienes pretenden convencerlos de una mentira que no existe", pero que "la estrategia es obvia, no se quiere discutir porque la afirmación es débil, no está corroborada, contrastada, ni probada", en referencia a los presuntos pagos recibidos de la empresa brasileña Odebrecht.
"Vengo hoy a su solicitud para enfrentar de pie y dando la cara al país una acusación falsa y ominosa, que solo puede ser entendida en el contexto de un deseo inconstitucional de apartarme del poder por la fuerza de sus votos", sostuvo.
"No está en juego mi permanencia en cargo, está en juego la estabilidad democrática, no apoyen una vacancia (destitución) sin sustento, porque el pueblo no olvida, ni perdona", expresó el mandatario ante el pleno del Congreso.
"No soy corrupto y no he mentido. Jamás he favorecido a ninguna empresa o persona durante mi gestión como ministro de Energía y Minas, ministro de Economía, gerente del Banco Central o primer ministro. Tampoco lo he hecho desde que soy presidente. Siempre he actuado conforme a la ley y a la ética profesional", indicó el mandatario.
"Confieso que no he sido lo suficientemente prolijo, pero no soy corrupto. Pido a la Nación, a ustedes, mis más sentidas disculpas, con claridad de mente y dolor de corazón, si no puse empeño en explicar hasta la saciedad mi conducta profesional", dijo en su discurso.
La permanencia de Kucyznski al frente de la jefatura del Estado ha sido seriamente cuestionada después de que la semana pasada se informara de que una empresa suya ofreció servicios de consultoría a la constructora Odebrecht entre 2004 y 2007.
