Su empleador revisó sus conversaciones privadas, situación con la que vulneró los derechos de la trabajadora.
Una mujer fue despedida de su trabajo en Perú, luego que el jefe leyera sus conversaciones privadas a escondidas y descubriera que vendía productos a través de Whatsapp en horario laboral, situación que llevó a la Justicia y terminó ganando.
Según consignó el Diario Constitucional de Chile, el empleador decidió despedirla –tras ver los mensajes de la mujer- por violar el reglamento de trabajo y de la buena fe laboral. No obstante, la trabajadora no se quedó de brazos cruzados y demandó a la empresa.
En primera instancia, el juez rechazó la demanda de la trabajadora por considerar que el jefe estaba facultado para revisar los computadores de la empresa. Además, validó el despido al concluir que había incurrido en una falta grave en atención a la normativa laboral.
Sin embargo, la mujer apeló ante la Corte Superior de Justicia de Junín (Perú), donde se dio vuelta el caso y se dictaminó que el despido vulneró el derecho que tiene toda persona a que sus comunicaciones y documentos privados sean adecuadamente protegidos.
En concreto, el fallo judicial consignó que "el medio probatorio usado por la demandada (el empleador), que accede al contenido de la comunicación privada (de Whatsapp) de la demandante con terceros, al extraerlos sin su consentimiento ni autorización judicial, vulnera la Constitución Política del Perú".
Por ello, se consideró como una "prueba prohibida" la utilizada por el empleador, por lo que no puede ser utilizado para iniciar el procedimiento de despido.
El caso, llegó a la conclusión que pese a que la trabajadora ocupó su Whatsapp en el computador de la empresa, esas conversaciones siguen siendo parte de sus comunicaciones privadas y el empleador no puede tomar decisiones en base a ello.
