La Organización de Estados Americanos (OEA) pidió este miércoles al Tribunal Constitucional de Perú pronunciarse sobre la legalidad del proceso en ese país, después de que Manuel Merino asumiera como nuevo presidente tras la destitución por parte del Legislativo de Martín Vizcarra por "incapacidad moral".
La Secretaría General de la OEA "reitera que compete al Tribunal Constitucional del Perú pronunciarse respecto a la legalidad y legitimidad de las decisiones institucionales adoptadas", dijo el organismo en un comunicado, en el que pidió que se garanticen las elecciones convocadas para abril del próximo año.
Según el organismo, es el Constitucional la institución encargada de pronunciarse sobre "las diferencias que pudieran existir en la interpretación de la Constitución, conforme a las acciones y planteos que realicen los actores políticos".
El Congreso de Perú destituyó este lunes a Vizcarra, y ya que no tenía vicepresidente, la sucesión recayó en Merino, el presidente del Parlamento e integrante del grupo político centro-derechista Acción Popular (AP).
La Secretaría General de la OEA expresó su "profunda preocupación" porque esta "nueva crisis política en Perú" se produzca a cinco meses de la celebración de comicios, llamando a los actores políticos a asegurar "el funcionamiento democrático por el bien del país, así como de garantizar la realización de las elecciones nacionales convocadas para el 11 de abril de 2021".
VETERANO POLÍTICO ENCABEZA EL NUEVO GABINETE
Más temprano este miércoles, el abogado y ex ministro del gobierno de Alan García, Antero Flores-Aráoz, juró como jefe del gabinete ministerial, y ya se encuentra conformando el nuevo grupo de secretarios de Estado.
Flores-Aráoz vuelve al Ejecutivo con más de 25 años en la arena política, después de haber militado en varias colectividades -entre ellos el Partido Popular Cristiano (PPC), de tendencia centroderecha, que presidió-, pero por sobre todo, se caracteriza por ser un político conciliador, razón por la que habría sido convocado al gobierno.
De momento, ha manifestado su intención de elaborar "un gabinete de concertación y unidad nacional"; hasta ahora, ya tendría un reemplazante para María Antonieta Alva en el Ministerio de Economía, y le "encantaría" que mantener en el Ministerio de Salud a Pilar Mazzetti, a pesar de que su gestión de la pandemia ha sido ampliamente criticada por el Congreso.
El compromiso del Ejecutivo, según el jefe de gabinete, es "cumplir estrictamente el cronograma electoral" con miras a las elecciones de abril, y a entregar el poder el 28 de julio.
