Los padres de Madeleine McCann, Gerry y Kate, afirmaron este lunes que se sienten "optimistas" de encontrar con vida a su hija, desaparecida hace más de seis años, el 3 de mayo de 2007 en Portugal.
En una entrevista con el canal ITV Gerry McCann aseguró que tanto él como su esposa "no aceptarán" que la pequeña está muerta "hasta ver evidencias claras".
Los padres de "Maddy" -cuya desaparición desde un complejo turístico de la localidad lusa de Praia Da Luz suscitó una atención mediática sin precedentes- mantienen su esperanza de hallar viva a la niña, pese a que hoy Scotland Yard alertó de que la conclusión del caso "no es inminente".
Aún hay "camino por recorrer" para resolver el caso, dijo la Policía en medio de la expectativa suscitada por el programa "Crimewatch" de la BBC, especializado en resolver delitos, que estará dedicado el próximo 14 de octubre al caso de la niña británica.
"Siempre hemos tenido esperanza. En los últimos años ha habido varios casos de niños y mujeres jóvenes que han sido encontrados tras haber sido secuestrados y retenidos durante largos periodos de tiempo", afirmó Gerry McCann.
El padre de la niña admitió que están "muy contentos" con el trabajo de la Policía Metropolitana de Londres, que este año puso en marcha su propia pesquisa después de que la Policía portuguesa cerrara el caso en 2008.
Gerry McCann agregó que tanto él como Kate se sienten "confiados" en que se acercarán "un paso más el hallazgo de Madeleine y de los responsables de habérsela llevado".
Investigación televisiva
En su edición del próximo lunes y como parte de la actual investigación que lleva a cabo la Policía británica sobre Madeleine, "Crimewatch" aportará detalles de lo sucedido e incluirá declaraciones de Kate y Gerry McCann.
En el programa, una niña de tres años hará el papel de Madeleine en la reconstrucción de lo sucedido la noche del 3 de mayo de 2007.
El inspector Andy Redwood, a cargo de la pesquisa, explicó que los agentes evalúan "gran cantidad de datos" de teléfonos móviles de personas que estaban en el centro turístico antes, durante y después de la desaparición de la niña.
Los detectives trabajan en la identificación de la propiedad de los móviles a fin de tener una idea completa sobre las personas que se encontraban entonces en ese área.
La decisión de Scotland Yard de iniciar su propia investigación oficial, al margen de la policía portuguesa, se produjo después de que el primer ministro británico, David Cameron, aceptara en 2012 una petición de los McCann para revisar el caso.